El hombre de 22 años que fue encontrado in fraganti ultrajando a una adolescente indígena de la Zona Maya de 14 años de edad, con problemas de facultades mentales, salió libre, pues a juicio de las autoridades judiciales del noveno municipio no hay delito que perseguir, no obstante que la menor narró la forma en que fue violada y encima de todo eso el médico legista, tras los exámenes médicos correspondientes, confirmó que hubo el abuso sexual.

La mañana del lunes, Sergio Zeferino Vázquez Sánchez, padre de la jovencita mancillada, denunció los hechos, toda vez que a pesar que su hija menor con retraso mental ante la instancia ministerial narró los hechos violentos que vivió, además que el médico legista confirmó el abuso sexual y el presunto responsable fue detenido, sin embargo salió libre horas más tarde, contra todo esto las autoridades judiciales no han actuado pese a ser un delito grave.

En este sentido, el padre de la joven asegura que en este caso existe una grave negligencia de las autoridades judiciales y ministeriales que en su momento tuvieron conocimiento de los hechos, mismas que iniciaron una averiguación previa, toda vez que el mismo médico legista de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), en su dictamen médico, concluyó que la agraviada que padece de sus facultades mentales efectivamente sufrió un abuso sexual.

Asegura que su hija sí fue violada, hecho en el que participaron tres personas más, que fueron las que llevaron a la adolescente bajo engaños a un predio lejos de la mancha urbana del poblado de Macario Gómez, comunidad ubicada a 20 kilómetros de la cabecera municipal de la Tulum en la Zona de Transición, lugar donde la ultrajaron y la dejaron abandonada bajo la advertencia de que de decir algo de lo ocurrido y señalar a los responsables la pasaría muy mal.

Vázquez Sánchez dio a conocer que ya interpuso su denuncia ante la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Quintana Roo, y agregó que las autoridades judiciales han incurrido en una brutal omisión y negligencia, al manifestar que el delito de violación además que es grave no prescribe y los agresores sexuales de su hija con problemas en sus facultades mentales deberían alcanzar de 25 a 50 años, de ser sentenciados.