Existencia de langosta en decadencia

No fue favorable la temporada de langosta que concluye hoy 29 de febrero, para los pescadores de la comunidad de Javier Rojo Gómez (Punta Allen) donde pese a que inició con buena actividad durante los primeros meses, apenas lograron alrededor de 70 toneladas; 20 menos comparado a la temporada anterior, donde el 50 por ciento de esta especie obtenida fue exportada al extranjero.

En este sentido, María de Lourdes Cruz, secretaria de la cooperativa de “Vigía Chico”, dio a conocer que la captura de langosta durante los primeros meses fue fructífera, sin embargo, en el transcurso de los meses decayó, de ahí que tras concluir la temporada, los pescadores apenas lograron alrededor de 74 toneladas.

La temporada de captura de langosta inició el uno de julio del año pasado y concluye este 29 de febrero, donde el 25 por ciento fue de cola de langosta y el 75 por ciento fue especie viva, captura baja comparada a la temporada anterior.

María de Lourdes Cruz dijo que cada año va en decadencia la captura del crustáceo, lo que se debe a la baja población del producto en el área de pesca, situación ocasionada por los malos tiempos como son huracanes que han pegado en las costas, lo que daña las trampas, los arrecifes lugar en donde se reproduce la especie.

Eso dice, y que por otro lado los pescadores son cuidadosos ya que procuran que la especie no se extinga y cada temporada logren buena captura, de ahí que aquellas que no cuenten con la medida, peso y talla son devueltas a su hábitat.

Afortunadamente de las 74 toneladas capturadas en la temporada que hoy miércoles 29 de febrero concluye, el 75 por ciento que fue de especie viva, en esta ocasión fueron exportadas al continente asiático, lo que significa mayores ingresos, ya que al entregarlas vivas, por su mayor peso, obtienen más ganancias.

Aunque en esta ocasión no fue la que esperaban los pescadores, al obtener menores ingresos, que igual se dedican a la actividad turística, difícil será para las familias de los pescadores subsistir, toda vez que por ser una comunidad distante a 65 kilómetros de Tulum, de camino de terracería, los precios de los productos básicos son muchos más caros que en la cabecera municipal.