Se desborda relleno sanitario

El relleno sanitario de esta ciudad se ha desbordado por la cantidad de basura acumulada, contaminando el manto freático.

Con las últimas lluvias, los lixiviados mataron todo alrededor de la celda y se filtraron a los cenotes.

Sin embargo, el gerente general de Pasa (empresa concesionada), Alfonso Gómez, rechazó esta versión aunque negó al periódico Quequi recorrer el lugar para verificar la información.

En entrevista, sostuvo que la capacidad de la primera celda soporta hasta el mes de marzo entrante, y que ya cuentan con los permisos para hacer la segunda celda.

Inaugurado en marzo de este año, el relleno sanitario que fuera concesionado a la empresa particular Promotora Ambiental de la Laguna (Pasa), ha encendido los focos rojos por el daño ambiental que pueda causar ante el acumulamiento de basura que sobrepasa los límites, vertiéndose fuera de la celda de 125 metros cuadrados.

Este problema se agravó con las lluvias que afectaron a la región, pues el agua que acarreó ocasionó que los lixiviados dañaran el entorno y, al filtrarse en los cuerpos de agua subterráneos, afecte a toda la red acuífera.

Al intentar recorrer el relleno, ubicado a 14 kilómetros al poniente de la ciudad, el gerente general de la empresa impidió el paso de este medio, argumentando que se requiere autorización del Ayuntamiento.

Al entrevistarlo sobre el estado en que se encuentra el lugar, afirmó que “la capacidad que tenemos todavía es para un año, tenemos espacio, está al primer nivel, estamos como a cuatro metros más para subir de nivel y para llegar a marzo con capacidad de la celda”.

Curiosamente, trabajadores de la propia empresa fueron los que dieron a conocer a este medio el desbordamiento de la basura, principalmente en la parte trasera de la celda.

“Estamos cumpliendo con la norma, razón por la cual se hicieron estudios para, precisamente, ratificar que no hay ningún tipo de contaminación, se evidenció en resultados”, alegó al respecto Alfonso Gómez.

Aceptó que con las lluvias hubo deslaves y problemas para los camiones recolectores de basura para acceder al sitio.

En la parte visible del relleno, se observaba vegetación devastada producto de los lixiviados que se desbordaron, así como una montaña de basura que superaba el nivel de la celda, la cual trataba de ser compactada con maquinaria pesada.
El encargado del sitio mencionó que diariamente se vierten en la celda entre 320 y 350 toneladas de basura.