El padre Pablo Pérez Guajardo pide que no se ignore la realidad de la gente de Playa del Carmen, en donde existe necesidades de habitación, de salud y de educación; señaló que en el Fraccionamiento La Guadalupana alrededor de dos mil menores no acuden a la escuela.

Agregó que en colonias, como Cristo Rey, que surgió de una lotificación irregular, y no cuenta con servicios básicos, ya se tiene un pequeño kínder, pero hay alrededor de 40 infantes que no reciben clases.

El Padre señaló que además de la falta de escuelas, también la carencia de actas de nacimiento limita el ingreso de los menores, por lo cual, llamó a las autoridades a atender esta situación.

Agregó que se tiene un proyecto para hacer una escuela rural o “social” para atender las zonas marginadas de Playa del Carmen, pero acusó que los procesos burocráticos frenan estas iniciativas: “sí hay unos requerimientos de tipo de infraestructura escolar, pero dada la urgencia en la que estamos, debemos tener flexibilidad”, consideró.

Detalló que hay zonas de Playa del Carmen, más allá del cuadrante urbano, donde diariamente sale una camioneta de redilas con diez o quince niños por la mañana y por la tarde “y hay otros que me costa que no van a clases porque están muy lejos, porque faltan papeles, es decir no estamos dando cumplimiento al artículo tercero de la Constitución, que es (otorgar) educación obligatoria”, aseveró el Padre.

El religioso destacó que los niños de Playa del Carmen van muy atrasados, pues incluso el nivel académico es cuestionable: “nuestros horarios hacen ver que tenemos menos tiempo de clase que en Yucatán”, aseguró. (NoticaribeNews)