Aun cuando se entorpece el dinamismo de la actividad turística con las medidas que han tomado los condóminos de Playacar por no tener respuesta a la exigencia de cambiar la administración de esta franja residencial y hotelera, los conflictos se acentúan sin llegar a acuerdos.

Ayer lunes los residentes de Playa Car, llevaron la manifestación de su inconformidad hasta las instalaciones de uno de los hoteles al interior de esta zona privada, donde reiteraron los desacuerdos con los hoteleros a quienes acusan de haberse apropiado de la administración y del comité de vigilancia, para cumplir con sus propios intereses, lo que se demuestra con la existencia de una saturación de más de mil cuartos de hotel, pasando por encima de los reglamentos municipales.

Gladis Acevedo Fernández, representante de los vecinos de Playa Car, manifestó que pese a cumplir con el pago de cuotas a la administradora, las carencias de servicios es evidente, mientras sólo se atienden las necesidades del sector hotelero, el cual aseguran ha tomado el control total de esta propiedad privada.

Recordó que las peticiones han sido precisas, desde la apertura del acceso a la carretera hacia el sur y la habilitación de pasos peatonales, requerimientos que también se llevarán al gobierno municipal.

Los manifestantes observaron la falta de topes en las vialidades, el deficiente servicio de recoja de basura, accesos a condominios en mal estado y la negativa para contar con accesos a las playas, además exigir un estudio de la fauna que se encuentra en riesgo ante el impacto ambiental que propicia la obra de los hoteles.

“No nos contestaron nada respecto de la convocatoria que estábamos solicitando de la suspensión del administrador, por esa razón estamos hoy aquí exigiendo nuestro derecho y exigiendo que cumpla con lo que acordamos”, refirió.

Massimo Carugatty, presidente del comité de vigilancia de Playa Car, solicitó a los inconformes llevar a cabo una reunión privada, sin embargo no hubo acuerdo y ante la negativa de diálogo, por lo que los manifestantes se dispusieron a cerrar los accesos de uno de los hoteles en esta zona.

Los condóminos denunciaron la intimidación por parte de la seguridad privada y elementos de la policía municipal que se apersonaron, donde inclusive les advirtieron que retirarían las placas de sus vehículos.

Sin acuerdos concluyó esta segunda manifestación, donde las irregularidades que hay al interior de Playa Car fueron expuestas mediante consignas y pancartas, sin embargo su administración se escuda de ser una propiedad privada, lo cual según lo inconformes exclusivamente cumple con los intereses que conviene a los hoteleros.

Los condóminos advirtieron que de no dar una pronta respuesta a seguirán las manifestaciones e inclusive plantearon el presente mes como límite para destituir a la administración mediante una asamblea general.