“El Gato” o “Radiólogo”, ex empleado de la Secretaría de Salud, acusado inicialmente como presunto responsable de pornografía infantil, quien estuvo a punto de dejar las celdas, cuando un Juez de Distrito le concedió un amparo al considerar que no existía tal delito ya que solamente se trataba de caricaturas, se encuentra tras las rejas sólo porque se le sigue el delito de violación en agravio de una menor.

En el primer caso, la Procuraduría General de Justicia ha interpuesto una apelación para que se reconsidere dicha decisión, toda vez que para la representación social existen los elementos suficientes para acusarlo como presunto responsable del delito de pornografía infantil.

De acuerdo a información dada a conocer por la subprocuradora de Justicia de la zona maya, Lic. Blanca Imelda Avila Várguez, refirió que en días recientes fue notificado el fiscal adscrito al juzgado, de la resolución del juicio de amparo que promovió la defensa de David Néstor Muñoz Quijano, alias “El Gato”, ante el Juez de Distrito, mismo que fue concedido al “Gato” y por ende se ordenó al Juez de lo Penal de esta ciudad a que modifique el auto de formal prisión dictado en su momento con un auto de libertad.

Siguió diciendo la fuente que “el Juez de Distrito argumentó que no había elementos para procesar debido a que no se trataba de un hecho delictivo o pornografía infantil porque se trataba de caricaturas con personajes mayores de edad, a lo que dijo la funcionaria de la Procuraduría que no estamos de acuerdo con el criterio del Juez de Distrito, por lo que se ha apelado esta determinación”.

Agregó la entrevistada que “esta orden ya fue cumplida por el Juez de lo Penal de esta ciudad, y que solamente se encuentra recluido en la cárcel municipal bajo proceso ‘El Gato’, como presunto responsable del segundo delito de violación en agravio de una menor, y que existe un bebé de por medio”.

Pero este caso se estará siguiendo de cerca para evitar que se cometa una injusticia con las personas que han sido agraviadas, pese a que el defensor particular del presunto responsable quiera manejar usos y costumbres, cuando en realidad no va con esta situación, toda vez que el presunto responsable es una persona con estudios y la muchacha sea de una comunidad pero existe una ley que se debe de respetar y hay que hacerla valer.