Policías acusados de abuso de autoridad

Policías municipales del Grupo de Operaciones Especiales (GOE) son acusados de detener injustamente y con lujo de violencia a dos civiles dentro del bar “Miguelitos”, en represalia de que la gerencia del bar le había pedido minutos antes a un grupo de policías municipales francos que se retirase porque iban a iniciar una riña entre sí, además de estar provocando a parroquianos, sólo para hacer alarde de poder. El resultado fue de dos civiles detenidos, un policía franco con fractura craneoencefálica y el principal alborotador detenido, pero ya fue liberado.

Javier Fuentes Rosado, propietario del bar “Miguelitos”, ubicado sobre la 5 Sur entre 25 y 30 avenida, dijo estar “indignado por el abuso de autoridad de los policías municipales Manuel Juárez Arias y José Marcos Fregoso Hernández, quienes estaban de descanso la tarde del jueves. Llegaron al bar como a las 17 horas acompañados de tres policías más, pidieron servicio y al calor de las copas empezaron estos dos a discutir entre ellos en una aparente medición de fuerzas sobre los cargos que ostentan y llegaron a ofenderse.

Por ello se les pidió retirarse para evitar problemas. Pero empezaron también a insultar a clientes que estaban en el lugar, aunque se logró que se fueran a las 17:50 horas aun sin pagar la cuenta de 400 pesos, con tal de que no haya represalias, porque amenazaron con clausurar el lugar mandando a fiscales, al decir que ellos son autoridad”.

Relató que “pasadas las 18 horas, cuando las puertas del bar estaban cerradas, llegaron varios policías del GOE, armados, golpeando la puerta de aluminio, la cual lograron romper, y al entrar empezaron a golpear a gente y a detener a dos clientes. Con ellos venía Manuel Juárez Arias que empezó a señalar a personas, que porque son autoridad y no les podían hacer nada. Eso lo dijo un GOE, y vimos cómo uno de los detenidos que estaba esposado era golpeado por Manuel Juárez Arias que estaba de civil, demostrando abuso de autoridad, e incluso antes de que eso pasara, llegaron los fiscales que vieron eso pero se sintieron amenazados y ellos argumentaban que no podían hacer nada. Los policías uniformados agarraron a dos parroquianos y los empezaron a golpear, los sacaron, los subieron a la patrulla, y se llevaron a Manuel Juárez Arias”.

Opina que “es incorrecto que hayan entrado los policías armados con metralletas sin preguntar qué estaba pasando, me siento indignado, porque no es la primera vez que me sucede esto con estos dos policías (Manuel Juárez Arias y José Marcos Fregoso Hernández), ya que hace cinco meses, en otro bar de mi propiedad denominado “Superior” (ubicado en la avenida Adolfo Rosado Salas con 65 bis), llegaron y afuera del lugar agarraron a golpes a un cliente que salía, lo dejaron ensangrentado y lo metieron al bar, pero les dije que lo sacaran porque podía tener problemas con los fiscales, en eso éstos llegaron y me clausuraron el negocio”.

Finalizó diciendo que “sentimos mucha indignación porque la autoridad es la que debe demostrar orden, pero si ellos son los que causan el desorden no tenemos esperanza”.

Los policías se llevaron detenidas a dos personas, derivando que algunos amigos de los arrestados, inclusive meseras del bar, acudieran a las instalaciones de Seguridad Pública para tratar de pagarles la multa a fin de que salieran libres, además de demostrar apoyo al propietario del bar, quien acudió a interponer su queja correspondiente ante la Dirección de Asuntos Internos.

La gente que acudió a la corporación policiaca manifestaba su impotencia y enojo por el actuar de los policías, y que luego supieron que a José Marcos Fregoso Hernández lo habían levantado paramédicos de la Cruz Roja a la puerta del bar “El Rincón Bohemio”, ubicado a una cuadra del bar “Miguelitos”, y dicen no haber visto quién lo golpeó porque a esta persona se le pidió que se retirase junto con Manuel Juárez Arias porque entre ellos querían pelearse. Presumen que fue el mismo Juárez Arias quien lo lastimó porque hay diferencia de masa muscular entre ellos y para que no lo detuvieran inventó que algunos parroquianos del bar “Miguelitos” lo habían golpeado por lo que pidió apoyo a los elementos del GOE para detener gente.

Se supo que el policía José Marcos Fregoso Hernández estaba siendo atendido en la clínica del ISSSTE porque presuntamente tenía una fractura craneoencefálica, desprendimiento del maxilar, fractura de un pómulo, y posible dislocación del hombro derecho, catalogándose su estado como grave.

La patrulla 7140 al mando del policía Rosendo Santos Rodríguez Chi y José Alberto Rodríguez García fue una de las que llegaron al bar “Miguelitos”.