Otra criminal negligencia médica en el IMSS

Denuncian ciudadanos negligencia médica y maltrato en el IMSS de Cozumel y responsabilizan a la institución por la muerte de una mujer de 56 años a quien no se atendió ni a tiempo ni de manera adecuada.

Este es sólo el más reciente de una serie de casos similares que han sucedido en todos y cada uno de los hospitales públicos de la isla.
Esta vez el problema fue en el IMSS e involucró la muerte de una mujer relativamente joven, de 56 años, quien falleció por insuficiencia renal y por lo que sus familiares consideran un mal manejo de su caso.

Los propios familiares de la persona hicieron circular este escrito en la isla este pasado martes: “La señora Aída Hortensia Gamboa Miranda (Q.E.P.D.), edad 56 años, nacida en Kantunil, Yucatán que era derechohabiente de IMSS el pasado 11 de febrero de 2012 con una dolorosa y triste agonía que tuvo que soportar sus últimos días por el maltrato y atención que recibió por parte del IMSS.

Ella tenía la enfermedad de insuficiencia renal el cual al momento de detectárselo y al darle la noticia de su enfermedad la supuesta ‘doctora’ lo que le alcanzó a decir es que ‘ya sus riñones estaban echados a perder y que ya se iba a morir’ (qué bonita forma de expresarlo verdad?). Pues a partir de ahí empezó el sufrimiento ya que el trato que recibió de ahí en adelante fue de lo más denigrante y del cual expresaré lo más reciente.

1. Se solicitó un pase para Cancún para que la revisara el oculista y llevara un tratamiento para vista pero según el director (del IMSS, doctor Jesús Mateos López) no había presupuesto para enviarla y aparte dijo que el mal era irreversible por la diabetes y la insuficiencia renal que presentaba.

2. Se le otorgó una resolución por invalidez temporal, por lo que se estuvo tratando de conseguir la permanente y el director no lo autorizó ya que según se podría curar y volver a trabajar como si nada. (¿pues no que ya no podían hacer nada con su vista?) Ustedes creen que una persona trabajadora que se dedica a ventas pueda trabajar sin ver? Y con insuficiencia renal? Qué contradicción.

3. Se presenta un cuadro de infección en la diálisis peritoneal (que en ese momento tenía), y según los ‘doctores’ es una gastritis lo que se le había presentado y así la llevaron por 4 semanas según controlando ‘la gastritis’, los familiares la decidieron sacar de la clínica del IMSS y llevarla a Mérida en una clínica de especialidades donde se detectó que efectivamente se trataba de una infección peritoneal (y los "doctores" del IMSS todos los medicamentos que le estaban aplicando eran para una gastritis, en ese tiempo la señora Aída bajó de peso porque ya no aceptaba nada su estómago y la traían con vómitos y toda débil por tanto medicamento mal aplicado y todo por instrucciones del "doctor" Aguilar). Aquí hacemos mención que una de las tantas cosas que el ‘doctor’ Aguilar siempre le decía es ‘señora, usted de alguna cosa tiene que morir’ (qué linda forma de tratar a un paciente ¿verdad?). En este paso que realizamos de llevarla al médico en la clínica particular de especialidades para controlarle la infección se obtuvo que se le aplicara la hemodiálisis, todo esto por cuenta de nosotros y todo fue un éxito y se pretendía que se le colocara una fístula.

4. (martes 31 de enero 2012) lo último que se le hicieron y lo que la llevó en un final que a nadie se le desea. Ya que se estaba pasando el tiempo para la colocación de la fístula y la línea de la hemodiálisis vence, al estarle aplicando la hemodiálisis se rompe la línea y los doctores nos piden que compremos la línea que costó 2 mil 200 pesos, que porque el IMSS no lo tiene. Así que el ‘doctor’ Aguilar le mal colocó la línea de la hemodiálisis y desde el momento de la aplicación la señora Aída le hace de su conocimiento al doctor que le dolía y a cada enfermera, doctor y persona que tenía contacto con ella su respuesta era que ‘todo es normal’, al día siguiente el dolor seguía y le salen erupciones en su cuerpo y se sigue quejando de dolor se le lleva al médico en urgencias y ¿qué creen? No hay doctores que la atiendan porque es horario de cambio de turno (y aquí hago mención que todo el personal que pasaba sólo se quedaban viendo de como se quejaba y nadie se dignaba a preguntar qué ocurría) ¿dónde quedó la ética, los valores o la calidad humana? Pues su servidora, Telma Reyes, le manda mensaje al director que es el doctor Jesús Mateos y le comenta la situación que ya se llevaba ahí más de 2 horas esperando la atención sin ningún resultado, al gran rato la llaman y la dejan por más de una hora ahí arrinconada porque no estaba el internista y sólo le tomaron la presión y ahí se le hizo mención al médico en turno que la revisara y que le dolía lo de su línea de hemodiálisis y según su diagnóstico es que las ronchas eran a consecuencia de ‘algo que comió’ (por favor ¿cómo pueden dar un diagnostico a "simple vista"?) ya que no le sacaron ninguna placa o ultrasonido ¿que sé yo lo que se debe de hacer? pero solamente dar un diagnóstico a la ligera. ¡No es posible!

Después de la hora adicional de espera resulta que se seguía quejando y sólo porque me atreví a preguntarle al doctor ¿Qué pasaba? , este según doctor me comenta que no hay medicamento, y le conteste que eso no era posible que me diera la receta y que lo iba a comprar pero él se negó a darme la receta que porque, los pacientes luego querían un reembolso, en ese momento le contesté que no me importaba lo que costara y que no se preocupara por esas pequeñeces lo único que quería en ese momento es que mi mamá dejara de quejarse de dolor y, sorpresa, señores que la bendita medicina que no había en la farmacia tiene un costo de 170 pesos… ¿eso valía todo el dolor y el tiempo de sufrimiento que estuvo pasando? No se vale, que se haga sufrir a una persona de esa manera.

También hago mención que desde la aplicación el catéter ya estaba drenando sangre y se le hacía mención al personal y de nuevo la frase ‘todo es normal’, (¿cómo pueden decir eso cuando ya era la segunda ocasión que se lo aplicaban y la primera no pasó esos síntomas) y señores así y no la atendían ahí la teníamos quejándose día y noche de dolor y cada vez que se le llevaba a urgencias no hacían nada ni placas, ni análisis nada... Y resulta que el día martes ya no pudo más y le dio un ataque donde se quejaba, gritaba ‘me están comiendo’ ‘me están comiendo’ y estaba delirando cuando por fin, entonces sí se le ingresó a urgencias donde dijeron los doctores ‘a Cancún de urgencia’ sin más la mandan a Cancún y cuando llega ahí le hacen todo tipo de análisis habidos y por haber… pero ya no se podía hacer nada porque en ese momento entró en coma y ya la infección (que en su momento se pudo haber controlado y a la que no se tomó la debida importancia) había avanzado mucho y los médicos del IMSS de Cancún comentaron ‘nosotros lavamos la ropa sucia que nos manda Cozumel’, ‘esto se pudo haber evitado si se hubiese tratado a tiempo’.

Ya de ahí no la recuperamos y estuvo entubada por días… hasta el sábado, con un final irremediable.

Señores sé que no se puede expresar esto en unas líneas y no se puede decir lo más claro que se quiera pero por favor esto no puede quedar así, ya que este es sólo un caso más de lo que pasa en el IMSS de Cozumel, y los doctores en general ya no tienen la ética que se requiere para ser médico han habido muchas muertes aquí en esta clínica pero no se ha hecho nada.

No puede ser que no se tenga el equipo necesario y el presupuesto para las necesidades de un hospital y que tengamos que esperanzarnos de otras instituciones.
Los mismos médicos que atiendes en el IMSS tienen sus clínicas particulares en donde te dicen lo mismo y te cobran más caro esto es puro ‘negocio’.

Pongan más atención en sus instituciones el IMSS el de aquí es una porquería, las instalaciones están muy deterioradas y horribles, deberían de venir a darse una vuelta por aquí para que vean la magnitud de deterioro y sin equipo.

Aunque las autoridades no hagan nada, aún tenemos padres, hermanos, parientes, amigos y conocidos que pueden ser víctimas de estos maltratos y atención deficiente por parte del IMSS.

Y por este medio, al menos pedimos que se dé a conocer y no quede en una víctima más de esas personas que ni al caso llamarles doctores”, concluye.

Las instituciones públicas de salud en la isla han tenido recientemente muchos casos polémicos, desde las muertes y agravamientos de pescadores que han denunciado negligencia e indolencia en la cámara hiperbárica del Hospital General, pasando por otra acusación similar por la muerte de una paciente en el ISSSTE y ahora este caso en el IMSS.

El denominador común de todos estos problemas ha sido la falta de materiales y equipos, el deterioro general del hospital y la poca disposición de servicio que, en consideración de los afectados, exhibe el personal en su trato con los derechohabientes, quienes constantemente reportan sentir que sus problemas no son importantes para empleados y directivos de estos hospitales.