Juez de Distrito dice sí a las calesas

Regresaron las calesas a las calles de Cozumel. El retorno de los carruajes se hizo bajo el argumento de que el Congreso del Estado notificó a la juez de distrito que esta actividad se realizaba antes del nacimiento de la ley que restringe su operatividad.

Caleseros dicen tener tres enemigos directos que no desean que permanezcan, entre ellos citan al regidor Francisco Reyes Novelo, presidente de la Comisión de Desarrollo Urbano y Ecología.

José Julio Azcorra Rejón, poseedor de diez concesiones de calesas, brindó la información en improvisada rueda de prensa en el interior de conocido estacionamiento en el primer cuadro de la ciudad. En ese instante dio a conocer que las 16 calesas que brindan el servicio a turistas estarían operando desde este lunes al mediodía, luego de doce días de controversias, cuando el ayuntamiento municipal los dejó fuera de circulación, haciendo valer la Ley de Bienestar Animal que prohíbe en su artículo 29 fracción XI, la circulación de este tipo de carruajes en vías pavimentadas del Estado de Quintana Roo.

Azcorra Rejón dijo que los cinco concesionarios de la actividad solicitaron un amparo, recibiendo como respuesta que “la juez de distrito indicó que no era necesario un amparo debido a que el Congreso del Estado le había contestado en su informe justificado, que las calesas de la isla de Cozumel no entraban en la Ley de Bienestar Animal del 2010 por los derechos adquiridos desde hace 18 años. La juez fue muy clara, nos contestó que no era necesario el amparo, porque ni se iba a aplicar la ley ni nos iba a perjudicar. Ella nos dio una copia del informe justificado del poder legislativo que entregamos al ayuntamiento”.

Asegura que paralelamente tramitaron “una nulidad de suspensión en el Tribunal Administrativo del Gobierno del Estado, que también se nos fue entregado en forma positiva, donde nos autorizan la nulidad de suspensión definitiva, eso también se le notificó al ayuntamiento por el magistrado”.
Anuncia que seguirán trabajando apegados al acuerdo firmado el 5 de julio del 2011 con las autoridades municipales en turno que les exigen 17 puntos obligatorios para su operatividad, entre los cuales destaca el cambio de equinos por unos de mayor capacidad de tiraje, mantenimiento de calesas, trajes, entre otros.

Expuso que los caleseros contrataron a una persona para que patrulle por donde circularán los carruajes a fin de verificar que no haya excremento sobre el asfalto, y en caso de que haya, se procederá a limpiarlo, además de que se dedicará a asear el asfalto de los seis paraderos que tienen a sus disposición sobre la avenida Rafael E. Melgar.

En el desarrollo de la entrevista, abordó un tema del que no había hablado anteriormente, haciendo referencia de que según en Cozumel los caleseros tienen tres enemigos públicos, “uno es el regidor Francisco Reyes Novelo, de quien no entiendo la posición de él, no sé por qué quiere perjudicarnos, ya se lo manifesté abiertamente, no entiendo su posición. Yo no entiendo de dónde saca que han muerto cuatro caballos, lo invito a que lo pruebe y que trabajemos en conjunto, porque de esta actividad dependen 40 familias hace 18 años”.

Enseguida mencionó, “el otro enemigo que tenemos es la agrupación No Calesas en Cozumel, que no ha querido dar la cara, y los caleseros comentan que hay un grupo de americanos que existen en la isla que son protectores de animales, no estamos en contra, al contrario los apoyamos, pero es distinto una mascota a un caballo” y no identificaron al tercero de sus “enemigos”.

José Julio Azcorra Rejón, Ángel Quijano, Gustavo Antonio Ortegón Verdugo, Raúl Alcocer, y Marco Gutiérrez, son los concesionarios cuyas calesas podrán trabajar.

Detalla que los carruajes serán tirados por tres razas de caballos, uno que pertenece a la clase Frisón y Percherón, y Moros Árabes, con valor unitario de 50 mil pesos.