Desde el 30 de abril, la fiscalía de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) hizo la apelación contra el auto de formal libertad que el Juzgado Penal de Primera Instancia de Cozumel dictaminó a favor de Nelson Pérez Torres, a quien se acusaba de darle a muerte a la polaca Monika Markiewicz en febrero del 2011. Sin embargo, la apelación es considerada por Moisés Torres Castañeda, abogado defensor de Pérez Torres, “como un mero trámite porque la fiscalía no aportó
nuevas pruebas, sólo apelaron por obligación”.

Moisés Torres Castañeda dio a conocer que “la inconformidad de la fiscalía fue por obligación como lo maneja el Código de Procedimientos Penales, el cual maneja que los fiscales tienen la obligación legal de cumplir con la apelación, aún sabiendo que el caso no procedería tienen la obligación. El único que podría excusarse de presentar una apelación es el procurador de Justicia en turno”.

Dijo que el caso de la muerte de la polaca cuyo cuerpo fue encontrado flotando a la orilla de la playa de Curva Tormentos la mañana del 5 de febrero del 2011, será turnado a un Tribunal Superior de Alzada en Cancún.

Torres Castañeda manifestó que “la fiscalía maneja como recursos fuertes que los testigos presentados por la defensa de Nelson fueron inducidos en sus respuestas, y que la valoración sicológica y siquiátrica que se le practicó al inculpado no fueron lo suficientemente profesionales, pero entiendo que la fiscal (Elsa María Aguilar Torres) tiene la obligación de tratar de reforzar sus dichos, pero ya lo determinará una sala superior luego de estudiar el caso, lo que calculo tardará aproximadamente seis meses”.

Hizo el comentario de que “esta apelación es un segundo juicio por llamarlo de alguna manera. Una sala penal va a revisar la sentencia de modo que, si existe alguna duda respecto al auto de formal libertad, entonces el tribunal puede revocar esa sentencia y la puede modificar, aunque también puede ratificar la sentencia emitida por el Juzgado Penal de Primera Instancia en Cozumel y se quedaría como está”.

Asegura que “durante el proceso penal llevado a cabo contra Nelson, la fiscalía nunca presentó argumentos sólidos, por el contrario presentaron un expediente armado. Yo diría mal armado inclusive, por las personas que estaban como coordinadora de Ministerios Públicos (Margarita Vázquez Barrios), y el ex comandante de la Policía Judicial (Octavio Hernández Solana). Cuando dije mal armado, me refiero a las incoherencias que hubo en el expediente, y que me sirvieron para defenderlo”.

Asimismo afirma que “a Nelson Pérez Torres no se le comprobó el delito de homicidio y en este momento cuenta con todas las garantías que goza cualquier ciudadano en México, para poder viajar a donde sea, inclusive fuera del país. Pero si al final del estudio del caso por parte del tribunal de alzada se determina que es culpable, entonces se le podría girar una orden de aprehensión; pero si se le declara inocente, seguiría con su vida normal el libertad y ahí acabará el juicio”.

En su declaración se dijo confiado de que “la resolución del tribunal de alzada será a favor de Nelson, porque la fiscalía no aportó nuevos datos y sus argumentos valorados en el juzgado penal durante el proceso, no tuvieron peso ni solidez”.

Culminó diciendo que más adelante se buscará que el nombre de Nelson Pérez Torres no aparezca en Plataforma México y desaparezca su ficha sinaléptica.

Este viernes 11 de mayo vence el término constitucional para que la fiscalía aporte los agravios que considere en su apelación, luego el tribunal de alzada tendrá en su poder el expediente para estudiarlo.