“Entre seis policías, cuatro de ellos encapuchados, me sacaron de la celda donde yo estaba y me esposaron para golpearme, que porque supuestamente yo había lesionado a uno de sus compañeros en el bar ‘Miguelitos’, incluso hasta sacaron al policía que detuvieron para que también me golpeara”, denuncia Víctor Froilan García Garibay, uno de los civiles arrestados en la reyerta.

Víctor Froilan García Garibay y Roberto Cañizalez Lagunes fueron las dos personas detenidas por la policía municipal en el bar “Miguelitos”, pero a decir de García Garibay “un policía que se que se llama Manuel Juárez, me estaba buscando pleito, se fue, y en eso que yo estaba en el bar ‘Miguelitos’, llegó con otros agentes preventivos me esposaron, me llenaron de gas pimienta la cara, me detuvieron, y en la policía me golpearon por 15 minutos, en algo que creo le llaman el patio. Antes de eso me rociaron los ojos con gas para que no los viera, entraron seis policías vestidos con ropa táctica, cuatro de ellos estaban encapuchados, a dos sí los reconocería. Me golpearon en la cabeza, testículos, en las orejas, en el cuerpo, en la cara me dieron con las manos abiertas para no dejar marcas, y en pegaron en las piernas, y sacaron de la celda a Manuel Juárez que lo tenían detenido, para que me pegara también, que porque golpee a uno de sus compañeros, habían otros detenidos que les gritaban que me dejen de pegar”.

Por su parte, Roberto Cañizales Lagunes, dijo que él se dedica a cuidar motos afuera de este bar y que nunca se peleó con nadie, pero fue detenido. Ambos fueron turnados al Ministerio Público del Fuero Común, acusados de golpear a un policía y dejarlo mal herido.