Sufre ingenio cañero pérdidas por 23 mdp

El secretario general del Sindicato de Obreros del Ingenio San Rafael de Pucté, Ludin Segovia Hernández, aseguró que la explosión del depósito de melaza sucedido el pasado lunes, dejó al menos 14 mil toneladas de este producto regados dentro y en zonas aledañas a la fábrica, lo que provocó pérdidas al grupo Beta San Miguel de 23 millones de pesos.

Aseguró que están en tela de juicio las acciones realizadas por autoridades de la fábrica, toda vez que hace una semana se le realizó una Auditoría por el ISO 9000, y el ISO 22 mil para que tenga la garantía de “Empresa socialmente responsables” y “Empresa Competitiva”, y pocos días después de una supuesta revisión minuciosa, se susciten este tipo de percances que aunque no dejó pérdidas humanas, sí puso en peligro la integridad de los más de 300 empleados sindicalizados de la fábrica de azúcar.

Señaló que a un año de que un trabajador perdiera la vida en un incidente similar, al momento la fábrica no ha solucionado al menos ocho de 23 modificaciones a la fábrica que debía hacer por instrucciones de la Secretaría del Trabajo y Protección Civil.

Ante esta situación, lanzó un llamado a las autoridades de la Secretaría del Trabajo y responsables de la fábrica de azúcar, como lo es la gerente general Guadalupe Sandoval, para que tomen cartas en el asunto, ya que a pesar de las ganancias millonarias que deja esta fábrica a los empresarios, esta no ha modificado sus estándares de seguridad para con los empleados.

Afectación a la población

Esta situación ya ha empezado a causar malestar entre la población, debido a que colonias aledañas como lo es la Obrera, ya tienen afectación con los olores de la melaza y los escurrimientos de esta materia que llegaron a los patios, aunado al temor de que este líquido espeso y dulce atraiga insectos y forme enjambre de abejas que en algún momento pongan en riesgo la integridad de los estudiantes de un jardín de niños y una primaria, que hay en la zonas aledañas a dicha fábrica.

Al respecto, Diana Rocío señaló que existe el temor toda vez que no es la primera vez que esta melaza es derramada por la fábrica, ya que constantemente por los tubos de desagüe de la fábrica que termina atrás de la colonia, se pueden ver restos que provoca que constantemente se sientan los malos olores y la atracción de insectos peligrosos.

Aseguró que este día amanecieron con el suministro de agua potable suspendido, toda vez que la fábrica está utilizando todos los cárcamos de bombeo para llevar agua y limpiar el desastre, “lo malo no es que suspendan el servicios, sino que lo hagan sin avisar por un problema que es responsabilidad de la empresa, no de nosotros”.

Ante esta situación, el alcalde de la comunidad, Carlos Sánchez, reconoció que ya existe comunicación con la Dirección de Protección Civil, quien realizó una verificación y evaluación dentro y en zonas aledañas a la fábrica, que arrojó como resultado que al momento no existe peligro o una afectación directa, sin embargo, podrían detectarse problemas a fututo como lo son una posible plaga de abejas, principalmente africanas.

Además, reconoció que esta situación de la melaza de no detenerse a tiempo seguirá escurriéndose hasta llegar a las alcantarillas, y sin duda provocará afectación durante la temporada de lluvias. “De por sí tenemos un sistema de drenaje obsoleto, donde apenas corre el agua, si le inyectas un líquido más espeso, la afectación más grave será sin duda cuando sea temporada de lluvias”.

Ante esto realizó un llamado a las más de 100 familias que pudiesen tener afectación a reportar cualquier situación derivada de este derrame de la melaza, para inmediatamente dar parte a las autoridades de protección civil y de la fabrica para que se tomen cartas en el asunto.

Dijo que independientemente de la afectación a la población, este problema definitivamente mantendrá detenida la economía de la comunidad, ya que de no haber trabajo no habrá dinero.

Reparación de la fábrica

Algunos obreros que se negaron a proporcionar sus datos, debido a que así les fue prohibido por el director de productividad de la fábrica de azúcar, José Ángel Oseguera, se pretende realizar una reparación temporal al depósito que reventó, y se tendrá que ir deshaciendo de la melaza como se vaya produciendo, ya que solo queda un depósito similar.

Señaló que según los ingenieros que ya trabajan y analizan el problema, existe la posibilidad de que el próximo viernes reinicie la molienda de caña de azúcar, aunque señaló que el depósito que explotó, recientemente había sido reparado y supuestamente mejorado.

Aseguró que al momento los más de 14 mil toneladas de melaza regados al interior de la fábrica están siendo regalado a productores de ganado, para que sirva como alimento para los animales, sin embargo, dijo que lo que quede se planea tapar con tierra, ya que es difícil que se limpie de la carretera por lo adherible de la melaza.

Cabe mencionar que esta afectación no es solamente para la fábrica de azúcar y para la población de la alcaldía de Javier Rojo Gómez, ya que al momento en el patio donde esperan los camiones cargados de caña se encuentran al menos 250 camiones cargados con caña quemada, muchas de ella ya inservible o seca por estar más de tres días expuesta al sol, además que dentro del patio de la fábrica o mejor conocido como “batey” hay otros 50 camiones en la misma situación.

Además de la cientos de hectáreas de caña de azúcar que están en los campos de los productores o que está ya cortada y que no se puede levantar debido a la falla en la fábrica azucarera.

Y la afectación de la economía de miles de jornaleros dedicados al corte de caña de azúcar de toda la ribera del río Hondo, que viven al día de esta única labor en esta parte del sur de Quintana Roo.