Con letreros en los que se leía “Exigimos a todas autoridades solución. El canal inundado hace 10 días. Gracias a Puerto Cancún” (sic), los vecinos reclamaban la falta de solución por parte de las autoridades del ayuntamiento de Benito Juárez.
El problema de las inundaciones no es nuevo para los habitantes de las colonias Lombardo Toledano y Donceles 28, quienes se encuentran al lado del exclusivo desarrollo inmobiliario Puerto Cancún, y que desde que inició su construcción se convirtió en una amenaza; pues para cimentar las enormes torres de condominios tuvieron que arrasar con varias hectáreas de manglar que actuaban como filtro y evitaban precisamente que los escurrimientos de aguas negras provenientes de colonias irregulares de Cancún llegarán hasta sus viviendas, que ahora están literalmente metidas en un cuenco.
Después de las intensas lluvias que desde la segunda quincena de octubre cayeron sobre Cancún, y que continuaron con la tormenta Rina, los pobladores de las colonias Lombardo Toledano y Donceles no han vuelto a tener calles secas; y los trabajos de rebombeo de agua que lleva a cabo Servicios Públicos municipales han resultado inútiles.
No se trata de agua de lluvia estancada de varios días, se trata de una acumulación de pestilentes líquidos, producidos por los escurrimientos de aguas negras que se juntan con los de las propias colonias que carecen de drenaje y de cárcamos.
Al lugar llegó el director de Servicios Públicos del ayuntamiento de Benito Juárez, Jorge Aguilar, para dialogar con los vecinos. Unos días antes, apenas el lunes pasado, Salvador Diego, director de Pozos, había anunciado la construcción de un cárcamo para evitar las inundaciones; sin embargo, el problema, al menos en el corto plazo, no parece tener solución. (NoticaribeNews)