Se empeñan taxistas de Cancún en limpiar su imagen. Dicen que es muy difícil evitar infiltración de la delincuencia

El sindicato de taxistas Andrés Quintana Roo, de Cancún, insiste en limpiar su imagen, luego de que con el asesinato de Francisco Achach, y otros seis taxistas, quedara en evidencia la infiltración del crimen organizado en este gremio.

Ahora fueron algunos de los fundadores de este sindicato los que justificaron la imposibilidad de controlar a miles de operadores de taxis.

Gonzalo Ariel Aguilar, familiar de uno de los taxistas lesionados en el ataque al bar “La Sirenita”, ocurrido el jueves pasado; además de Gonzalo Salas Acuña y José María Ávila Gamboa, quienes acumulan más de 30 años en el sindicato, en conferencia de prensa, señalaron que no obstante que tienen “estrictos controles” de seguridad para ingresar a este gremio, en los últimos años, ha ido en notorio aumento el número de involucrados en hechos delictivos.

Ávila Gamboa comentó que luego de que se concluye el trámite de canje o refrendo de placas de taxi, en el cual la secretaría de Infraestructura y Transporte (Sintra) establece ciertos candados, el operador puede cambiarle un número al taxi para delinquir y ya no ser ubicado el taxi.

Destacaron que una medida posible para evitar la participación de personas con intereses ajenos al sindicato, podría ser la prohibición de que los choferes subarrienden los taxis, pues ello ha permitido que cualquier persona conduzca un taxi. (NoticaribeNews)