Propiedades de Michael Kelly en el Caribe mexicano, a la espera del remate

Puerto Cancún es un proyecto riesgoso. A cuatro años de su inicio de edificación, el desarrollo inmobiliario turístico erigido por Michael Kelly, ha sido calificado como un “sitio de riesgo” por grupos de corredores de Bienes Raíces tanto en Estados Unidos como en México.

El calificativo se da por el proceso legal que enfrenta actualmente Michael Eugene Kelly Hogdson en la Corte Norte del Distrito de Illinios, Chicago, por el delito de fraude procesal por el orden de 419 millones de dólares.

Michael Kelly se encuentra recluido en el Centro Correccional Metropolitano de Chicago, Illinois. El próximo mes de diciembre, el otrora “inversionista”, cumplirá cinco años encarcelado, ya que fue detenido el 25 de diciembre del 2006.

El proceso jurídico se encuentra en su segunda etapa. De acuerdo con información de la Comisión de Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en Ingles), hasta el momento se han rastreado de forma oficial 310 millones de los 419 millones de dólares obtenidos por Michael Kelly por el delito de fraude procesal.

Lo anterior significa que la fiscalía ha comprobado esa cantidad y se espera que antes del mes de abril del 2012, se pueda completar toda la comprobación para que se dicte la sentencia en contra del creador e impulsor de Puerto Cancún.

En primera instancia, la Corte del Norte de Illinios maneja la condena de 20 a 30 años más la remuneración para los más de 100 mil afectados por las acciones ilegales cometidas por Michael Kelly.
Dentro de este contexto, la unidad denominada "Maestra Especial" de la Comisión de Valores de Estados Unidos, informó a la Corte Norte del Distrito de Illinois sobre las propiedades de Michael Eugene Kelly Hodgson en Puerto Cancún, además de hoteles y otros inmuebles como yates y casas en el destino turístico, producto del millonario fraude a cientos de jubilados estadounidenses con el que se enriqueció por más de 419 millones de dólares.

Entre los bienes rastreados al detenido en diciembre de 2006 tras un viaje corto a Estados Unidos, se encuentran lotes dentro del desarrollo de lujo Puerto Cancún con un valor estimado en 65 millones de dólares, y las torres Bella Vista, proyecto de 232 unidades proyectadas en cuatro edificios, obra que aún no se completa y es del Grupo Kelly.

Douglas A. Doetsch, encargado de la unidad "Maestra Especial", dedicada a recabar toda la información sobre los bienes de Kelly Hodgson y su familia, informó en mayo pasado a la Corte de Distrito Norte de Illinois que se han reunido en constantes ocasiones con el Grupo Kelly para discutir el futuro de Bella Vista, ubicado en la avenida Bonampak. Las dos primeras torres están construidas, la tercera está en obra negra y la cuarta está detenida.

Las ventas de las torres de lujo se encuentran dentro de lo que se consideró como el proyecto de "una ciudad dentro de la ciudad". Hasta abril de este año se registró 74% de los condominios vendidos en la primera torre, 69% en la segunda, 61% en la tercera y 43% de
las unidades de la última torre aún sin desarrollarse, según el reporte 06-CR-964, entregado al juez Ronald Guzmán, de la Corte de Distrito de Illinois.

El documento detalla que las torres Bella Vista requieren de una inversión de 11.8 millones de dólares de fondos adicionales para completar la construcción de los edificios tres y cuatro, situación que el Grupo Kelly aún analiza junto con las autoridades estadounidenses para resarcir los daños causados por Kelly Hodgson a los defraudados.

Proyecto inseguro

A raíz de lo anterior, Puerto Cancún, uno de los proyectos más ambiciosos de México, con inversiones por 700 millones de dólares (518,4 millones de euros) ha sido clasificado como "sitio de riesgo" por un grupo de corredores de bienes raíces en Estados Unidos, al mantenerse formalmente el proceso judicial contra Michael Eugene Kelly, uno de los principales inversionistas y actualmente preso en Chicago, con cargos por fraude a pensionistas estadounidenses.

En el 2008, según informaciones publicadas por medios locales e internacionales, el Grupo Kelly, reportó utilidades de más de 200 millones de dólares (más de 148 millones de euros) en contratos de compra-venta de ese proyecto inmobiliario, iniciado en 2001, que contempla la construcción de un complejo residencial, áreas para deporte, instalaciones comerciales y locales de entretenimiento, en una superficie de 327 hectáreas.
El capital invertido 127 millones de dólares (94 millones de euros) incluye gastos adicionales para dragado, urbanización de 252 hectáreas y obras inmobiliarias, cuyo estado de ejecución en este momento es del 55 por ciento.

El Grupo Kelly espera ganancias por más de 500 millones de dólares (370,3 millones de euros), con la venta de sus predios, además de 2.000 millones de dólares (1.481 millones de euros) en inversiones adicionales durante los próximos ocho años
Cabe recordar que el magnate estadounidense que radicaba en Cancún cuando fue detenido el 22 de diciembre en la Clínica Mayo, en Jacksonville, Florida; justo cuando iba a ser dado de alta tras una revisión por problemas cardiacos, cuenta en su inventario de propiedades con un yate de 126 pies, de nombre "Time", con un valor de 2.2 millones de dólares.

Los fiscales encargados de ubicar todo lo que adquirió Kelly en los últimos años, incluyeron un jet localizado en un hangar del Aeropuerto de Toluca, estado de México, valuado en 273 mil dólares.

Los hoteles también figuran en la lista de los bienes: el Avalon Grand Cancún, Avalon Reef Club Isla Mujeres, Avalon Baccara y el Avalon Excalibur Acapulco, todos con un valor entre 11.9 y 13.1 millones de dólares.

En Isla Mujeres se encuentra un lote frente a la playa con una extensión de cinco mil 150 metros cuadrados, y un valor de 1.2 millones de dólares.
El Buró Federal de Investigaciones (FBI) tenía una investigación sobre todo el esquema utilizado por Kelly para enriquecerse a costa de cientos de estadounidenses que gastaron sus ahorros con la esperanza de obtener ganancias anuales de hasta 20% de lo que invertían en un contrato interminable denominado "universal", de tiempos compartidos en sus centros de descanso en Cancún.

Tras su captura en Florida, llevada a cabo por policías federales, "marshalls", el presunto estafador fue trasladado a Chicago, Illinois, el 9 de enero de 2007, y presentado el 22 de enero para su audiencia de detención con la que se inició el proceso que sigue hasta la fecha.