Avanza certificación de las playas Las Perlas y Delfines

A punto de ser certificados los balnearios públicos Las Perlas y Delfines, en tanto que Marlin y Punta Nizuc podrían recibir también su certificación, aunque en realidad la única playa que cumple con todos y cada uno de los requisitos exigidos para ser aprobada es la primera.

Para que un balneario pueda contar con el certificado de calidad de playas debe tener determinados estándares de calidad ambiental, sanitaria, de seguridad y de servicios para el disfrute y tranquilidad de los usuarios.

Según informaciones recabadas, la certificación brinda la garantía de que en las playas se cumplen las especificaciones de la NMX-AA-120-SCFI-2006, creada por varias instancias, entre ellas Semarnat, Fonatur, Secretaría de Marina, Secretaría de Salud y Sectur y las playas que cuenten con todos los requisitos solicitados y consigan su certificación deberán ser evaluadas periódicamente por un organismo de certificación acreditado conforme a la ley.

Fuentes de la Zofemat manifestaron que según la NMX-AA-120-SCFI-2006 entre los requisitos que conllevan la certificación de playas figuran los relativos al almacenamiento de los residuos sólidos y en este sentido, los botes de basura deben contar con tapa y no tener contacto con el suelo, “lo que actualmente sólo se cumple en Las Perlas; del mismo modo los balnearios deben contar con señalización e información suficiente para el usuario sobre las características de la playa, como oleaje, corrientes de retorno, pendiente de la playa, áreas y situaciones de riesgo, pero esto no se especifica en ninguna, ni siquiera en las que están a punto de ser certificadas”.

Las fuentes agregaron que en lo que respecta a los accesos y servicios adecuados para personas discapacitadas, otro de los requisitos para la certificación, “ahora mismo la única que cumple en forma es Marlin, donde afortunadamente se terminó la rampa para que puedan entrar las sillas de ruedas; lo malo tanto en esta playa como en Langosta, Punta Nizuc y Mirador II es que se utilizó madera tratada para la remodelación, cuando la norma especifica que debe ser madera natural, que es la que se usó en Las Perlas”.

En este sentido, revelaron que cuando el Gobierno del Estado tuvo conocimiento de que la empresa contratada para los trabajos de remodelación de estas playas había adquirido madera tratada, más económica que la natural, puso el grito en el cielo e incluso estuvo a punto de rescindir el contrato, consciente de que esto significaba una mayor dificultad a la hora de solicitar la certificación de Marlin, pero el mal ya estaba hecho, se había aplicado la inversión designada y no se pudo dar marcha atrás.

“Y no entiendo cómo se va a certificar Delfines cuando el acceso para discapacitados no es el adecuado, las rampas de concreto terminan abruptamente, no tienen continuidad, acaban en un enorme escalón por el que es materialmente imposible que pueda moverse una silla de ruedas”.