Morelia 3-1 América... Se consolida el Águila como cliente michoacano

Hoy Superlíder, hasta que Santos diga lo contrario, el cuadro michoacano fue mucha pieza para el equipo azulcrema, que ante un "grande" del torneo conoció su verdadera dimensión y perdió 3-1.

Sólo por momentos con gran empuje y dueñas del partido, las Águilas evidenciaron que la transición todavía les pesa, además de las numerosas bajas por lesiones, suspensiones o convocatorias al Preolímpico.

Varias de las flaquezas del América salieron a la luz esta noche, ya que el Morelia presumió la continuidad de hace varias campañas, aunque también el trabajo que les cuesta realizar partidos sin altibajos.

Dueños absolutos del ánimo y la pelota, los locales ya ganaban 2-0 al minuto 20’, cuando el América sólo era una sombra de su versión renovada.

Con dos canteranos como zagueros centrales (Erik Pimentel y Jorge Reyes), los del “Piojo” no sintieron lo duro sino lo tupido.

Apenas al 8’ ya habían recibido el primer tanto, un "Señor Gol" de Christian Valdez, verdadero ejemplo de lo que es un riflazo al ángulo desde fuera del área.

Con ese señorío se mantuvo Monarcas, que consiguió el 2-0 mediante Miguel Sabah, quien se encontró con el balón frente al arco, luego de un travesaño por un desvío de la zaga visitante tras un tiro de Joel Huiqui.

Sin embargo, el América mostró su cara oculta a partir del ingreso de Israel Jiménez, quien acompañó a Christian Benítez en el frente para obligar a Morelia a bajar revoluciones ofensivas.

Las Águilas tomaron el movimiento, que incluso fue de esquema (de 5 a 4 zagueros), como un tanque de oxígeno y así hicieron ver mal a Morelia, cuyo arquero, Federico Vilar, sufrió de más ante todos los balones por arriba que enviaba el visitante, producto de las constantes faltas locales fuera del área.

Así llegó el 2-1, obra de Benítez, quien remató luego de un desvío con el hombro de Sabah, justo después de que el mismo ecuatoriano había cabeceado al poste y Jesús Molina apareció en el contrarremate.

Pero las cosas cayeron por su propio peso. Más sólido y consistente, el Morelia puso orden, en buena medida por la actuación de Joao Rojas, quien al 63’ obligó a Moisés Muñoz a dar un manotazo salvador para desviar un disparo suyo, en el que el silbante no se percató que era tiro de esquina.

Al 68’, Jaime Lozano puso el 3-1 y resolvió el duelo al concretar un penal que podrá prestarse a la polémica, de Aquivaldo Mosquera sobre Aldo Leao por un empujón con el antebrazo.

Con el tanto, la afición michoacana, que incluso tuvo representantes en las faldas del cerro aledaño para ver “gratis” el juego, se llenó de júbilo por ver que nuevamente el Morelia es “Jefe” ante las Águilas, que en los últimos 5 años han perdido 7 juegos y ganado sólo uno en casa de Monarcas.