Morelia 2-1 Santos... Monarcas ganó, pero dejó vivo a Santos

Santos Laguna todavía se mueve y amenaza con resucitar en el juego de vuelta en Torreón.

Monarcas Morelia se conformó con 25 minutos de buen futbol desplegado en la fría cancha del Estadio Morelos, para obtener una ventaja de 2-1, la cual en estas instancias, no resulta ser definitoria.

De algo le sirvió a Santos Laguna la constante arenga de Benjamín Galindo. Su ir y venir en la zona técnica gritando “vamos, vamos”, parecía no tener eco en sus jugadores a lo largo de los primeros 84 minutos de la contienda.

El equipo michoacano sacó un resultado que le favorece, y si bien ya pudo sobrellevar ante Cruz Azul una ventaja similar, la peligrosidad de los laguneros en su casa y su ambiente, auguran una noche pesadilla para el equipo de Tomás Boy el próximo sábado.

Monarcas fue un cuadro conformista, de momentos. No contaba con que Santos también tendría su oportunidad de despertar del letargo.

Desde temprano Monarcas comenzó a ahogar a los albiverdes con los ensayos de Miguel Sabah, pero fue Jaime Lozano quien tomó la iniciativa, al minuto 13’ y pusó a prueba a Oswaldo Sánchez desde las afueras del área.

El oriundo del tapatío barrio de San Andrés no superó la prueba, a pesar de alcanzar a manotear el zurdazo y el balón se incrustó en el ángulo superior derecho
de su portería, para el 1-0 a favor de Monarcas.

Once minutos después, tras una gran jugada individual de Alonso Sandoval le rompió al cintura a Daniel Ludueña, metió un centro que remató de cabeza Edgar Gerardo Lugo, para vencer el arco del equipo de Torreón.

El escenario y la mesa estaban dispuestos para que Monarcas hiciera pesar la localía y sacar una ventaja que, como a lo largo de toda la Liguilla se ha dado, resulte definitoria.

Pero no fue así. Monarcas desaprovechó un sinfín de ocasiones, cuando las tuvo a modo y a pesar de las rabietas de Tomás Boy ante las incesantes fallas de sus jugadores, buscó modificar para hacer pesar su ataque, ante un Santos que no encontraba la fórmula para acercarse en el resultado.

Aldo Leao Ramírez intentó ser un paliativo al ataque, pero no pasó nada con el sudamericano, que no tuvo una presencia contundente en el encuentro.

Fue hasta el minuto 84’, cuando Santos respondió, luego de haber tenido una situación clara de José María Cárdenas a merced y con el arco abierto.

Oribe Peralta recibió una pelota para quedar en mano a mano con Federico Vilar, y tras una gambeta al arquero argentino, definió para mantener con vida a su equipo.

Los laguneros aún respiran, y lo hacen con fuerza, a pesar de que para ello requirieron un tanque de oxígeno, pero con un alto valor motivacional, pues volverán a casa con tan solo un gol de diferencia.

Es la oportunidad de Santos de demostrar que aún se pueden dar las volteretas en la Liguilla, las cuales, hasta ahora, han sido inéditas.