Estudiantes 2-1 Atlante... Canto de vida para los de la UAG

El de Juan Carlos Leaño fue un grito eterno. Un cabezazo dentro del área significó una victoria importantísima, inédita en las cifras de Estudiantes Tecos y le dio a su equipo oro molido para seguir vigente en la lucha para la salvación.

Era el ahora o nunca para Estudiantes Tecos, el momento de la victoria, de acortar distancias con Atlas en la Tabla Porcentual, de levantar la mano y mantener su vigencia en el Máximo Circuito y de mostrar que aún tienen vida.

Y quién mejor que el jugador cuya mirada observa como mil dedos le apuntan, para sacar la casta, y con un sólido remate de cabeza, al 31’ del primer tiempo decretó el triunfo para la causa familiar, en un momento en que el duelo estaba sumamente apretado.

Estudiantes Tecos tiene vida, porque amanecerá este sábado a dos puntos de distancia de los Rojinegros del Atlas, que en esta jornada visitará a Tigres en el "Volcán", convirtiéndose en una misión imposible para poder sumar unidades.

"Mientras haya vida, hay esperanza", recita el dicho, y aunque a Estudiantes se le ha visto como el señalado para descender, la victoria conseguida es un tanque de oxígeno para los de Héctor Hugo Euguí.

La victoria de esta noche -que, por cierto, fue la primera de los zapopanos en lo que va del certamen- se abrió desde temprano en el encuentro. Rodrigo Ruiz mandó un cambio de juego desde el costado derecho del campo hacia el fondo del corredor, apareció Edgar Solís para retrasar la pelota de primera intención y Eduardo Lillingston la mandó al fondo, a los 13’ minutos del encuentro.

Nueve minutos después, al 24’ Michael Arroyo hizo una jugada individual en los límites del área, sacó su disparo fuerte y cruzado y Christian Martínez colaboró con el tanto atlantista, a pesar de la comba que tomó la pelota.

Pero al 31', en el cobro de un tiro de esquina, apareció el solido testarazo del dueño de la casa. Juan Carlos Leaño gritó el gol como si fuera el de la salvación matemática, sabedor de lo que ese gol le puede dar a su equipo a mediano plazo.

A pesar de su error en el tanto del Atlante, Christian Martínez, guardameta de los emplumados, colaboró para que esa ventaja parcial no se diluyera con el tránsito de los minutos. En tres ocasiones apareció de forma providencial para salvar a su equipo del empate, convirtiéndose en una de las figuras del encuentro.

En los minutos finales, Ezequiel Cuevas salvó al Atlante de que la desventaja se ampliara, al barrerse sobre la línea de gol para sacar la pelota, ante una ejecución de Rodrigo Ruiz.

Estudiantes suma cinco puntos en el torneo, pero más allá de la contabilidad de este torneo, en la Tabla Porcentual, que es la que cuenta, acortó una distancia fundamental. Estudiantes está más vivo que nunca, y la lucha por no descender está que arde en territorio jalisciense.