Sacrificio, pundonor, lucha y hasta nerviosismo pero sin una pizca de puntería para Cruz Azul fue la tónica de La Máquina esta noche en el empate 0-0 ante Corinthians en el Grupo 6 de la Copa Libertadores.

La afición cumplió con su parte y abarrotó el Estadio Azul, presionó al portero Julio César y a todo rival que se atrevió a desafiar el tiempo activo de juego pero en la cancha los jugadores celestes no encontraron el camino del gol.

Todavía en los instantes finales del encuentro, el balón coqueteó con la línea de gol cuando Omar Bravo se alzó dentro del área y remató con la intención de por fin abrir el marcador. Pero la defensa hizo su parte ante una tribuna que exigía se rompiera el cerco del Timao.

Incluso, Jesús Corona se vistió de héroe por segunda vez en el encuentro cuando al 91' cortó el último contragolpe amazónico. Para la mala fortuna de La Máquina, el duelo no sólo costó dos puntos en el presupuesto del club celeste dentro del certamen internacional sino que además padecieron la baja de un central más.

Corría el minuto 44' cuando Julio César Domínguez se estiró en el área chica para cortar un centro de Ralf de Souza. El esférico pasó por debajo de las piernas de Jesús Corona que tan sagaz como un felino estiró la mano para alcanzar el esférico y evitar el autogol.

Sin embargo, el sacrificio de Domínguez fue muy costoso para La Máquina, pues se lesionó y tuvo que ser sustituido por Manuel Mariaca, canterano que había debutado en liga el 3 de julio de 2011.

El joven Mariaca tardó minutos en poder entrar en ritmo ante los brasileños que desde ese momento empezaron a generar tal peligro en la meta celeste que se daban el lujo de hacer paredes dentro del área pero sin la puntería necesaria para anidar el balón.

Enrique Meza recurrió a un delantero y sacrificó a Christian Giménez a la contención con la esperanza de recuperar el terreno perdido y por momentos logró contrarrestar el juego de los cariocas.

Tiros de esquina por los dos costados fueron la mejor arma celeste, incluso a los 75 minutos cuando Gerardo Flores hizo un remate de media tijera que mandó el balón cerca del poste.

Cuando más presionaba el equipo del "Ojitos" con centros y desbordes por ambas bandas, los brasileños sacaron el colmillo y en la primera oportunidad que tuvieron llevaron el balón lejos de su marco, para hacer que el reloj apagara la esperanza de una victoria celeste.

Al finalizar el duelo, un elemento del staff del Corinthians protagonizó un altercado con un aficionado pero la seguridad impidió que la situación se saliera de control y el entrenador sólo se llevó un baño de refresco y cerveza.

Cruz Azul sigue de líder en el Grupo 6 con siete unidades, mientras que el Timao se quedó con cinco puntos.