El Monterrey quedó en su punto para enfrentar la Liguilla. Con una goleada de 3-0 frente al Atlante, los Rayados se consolidaron aún más como candidato al título, mientras que los Potros reiteraron todos sus males.

El cuadro de Víctor Vucetich impresionó por la tranquilidad como obtuvo estos tres puntos, que los ubican como sublíderes, ya que los sumaron con varios estelares en la banca o el palco, por lo que tuvieron acción varios elementos del cuadro alternativo, tales como Abraham Carreño, César de la Peña, Héctor Morales y Jesús Corona.

Con ello, los Potros terminaron el torneo sin ganar en casa, además de que se ubicaron como la peor defensa.

Este último "logro" lo coronaron al recibir el primer tanto apenas a los 20 segundos de iniciado el encuentro, un mal que los aquejó todo el semestre, en el que en 9 partidos recibieron al menos un tanto antes del minuto 20.

Como si la consigna fuera dejar pasar al rival, la zaga azulgrana vio llegar a Humberto Suazo, quien le pasó a Abraham Carreño para que éste definiera a la salida del portero Antonio Pérez.

Los locales quisieron oponer resistencia con intentos de Osvaldo Martínez o Francisco Fonseca, pero nunca con la profundidad que con facilidad lograba el cuadro rayado, que al minuto 34’ estrelló un balón en el poste mediante tiro de Ángel Reyna y que al 40’ desperdició una llegada porque Carreño envió el balón al lado del palo en el mano a mano contra el arquero atlantista.

Todavía antes del descanso, el joven Jesús Corona mandó un disparo cercano de peligro similar, además del que intentó ya al 54' y que salvó el "Poeta" Rodríguez.

Quien no perdonó fue el "Chupete", autor del 2-0 al 56’ con un remate de cabeza luego de un centro preciso y dibujado de Carreño.

El tercero del visitante también cayó gracias al chileno, que disparó al arco, donde fue el portero quien finalmente empujó hacia sus propias redes.

Hasta que se vieron en la lona, los Potros reaccionaron, aunque con un poco de crueldad por los dos goles que festejaban sin percatarse de que había bandera levantada por fuera de lugar.

El primero fue al 77’ en que Andrés Mendonza ya había empujado a las redes, y el otro al 83’, cuando un tiro de Osvaldo Martínez también había vencido a Jonathan Orozco, pero con un jugador azulgrana en fuera de lugar que desvió el tiro.

Tras ganar la Concachampions a media semana, el Monterrey sumó lo suficiente para alcanzar el segundo puesto, que sólo le podría arrebatar el América este domingo. De cualquier modo, se ratificó como gran aspirante al título.