Roberto Borge, el gobernador de imagen y su enfermiza política en medios de comunicación

Fabiola Cortés Miranda

CANCÚN, MX.- No hay día de la semana, ni uno sólo, en que a los correos de reporteros y periodistas de Quintana Roo, y a los de los corresponsales, no lleguen tres, cuatro, cinco, cualquier cantidad de boletines de prensa con contenidos fantasiosos, de mentira, y hasta de risa, donde el gobernador Roberto Borge Angulo, el “todo poderoso”, “invierte” cientos de millones de pesos en esto y en otro, “ordena” hacer tal o cual cosa, “crea” miles de empleos; o por decreto “resuelve” hasta desastres naturales. Y antes del envío del boletín, llegan a los teléfonos celulares los avances informativos de los comunicados, los cuales son publicados en prácticamente todos los medios impresos y leídos en los espacios de radio y televisión, inclusive en algunos de alcance nacional.

Estos boletines de prensa que todos los días del año, desde que asumió el gobierno Roberto Borge, en abril de 2011, aparecen firmados por la “redacción”, implican un enorme costo al erario público; es decir, en los límites de la absurda política mexicana, los ciudadanos pagamos a los medios de comunicación para que nos engañen publicando las mentiras salidas desde las vocerías.

Como el gobernador Roberto Borge está seguro que sus gobernados padecen algún tipo de retraso mental, y que la impunidad es lo que reina en este país, y que además él es el cacique de este pueblo llamado Quintana Roo, no le importa engañar sistemáticamente.

Aunque usted vea en casi todos los medios de comunicación, la imagen de Borge Angulo y sus “súper poderes”, la Unidad del Vocero, a cargo de Rangel Rosado, se atreve a asegurar que no se tiene firmado ningún convenio con medios de comunicación para difundir las acciones o logros del gobernador Roberto Borge Angulo, porque “según el artículo 134 constitucional, de ninguna manera se pueden tener acuerdos contratados con ningún medio para la difusión de la imagen o del mismo gobernador Roberto Borge Angulo” (solicitud 00044714).

La afirmación del vocero Rangel Rosado sólo puede entenderse por su infinita ignorancia, pues eso no es lo que dice el artículo 134; lo que señala es que “la propaganda, bajo cualquier modalidad de comunicación social, que difundan como tales, los poderes públicos, los órganos autónomos, las dependencias y entidades de la administración pública y cualquier otro ente de los tres órdenes de gobierno, deberá tener carácter institucional y fines informativos, educativos o de orientación social. En ningún caso esta propaganda incluirá nombres, imágenes, voces o símbolos que impliquen promoción personalizada de cualquier servidor público”.

Lo cual tampoco se cumple en el caso del gobernador Roberto Borge, pues en los boletines enviados siempre se resalta su nombre, además de que se acompañan de múltiples fotografías; las cuales igual que todo lo que sale de la Unidad del Vocero, están truqueadas; y así, gracias a Photoshop, Borge Angulo luce como con varios kilos menos, casi siempre con una “hermosa” sonrisa; y nunca se le echa de ver el ligero estrabismo que tiene. Eso sí es violar el artículo 134 de la Constitución, y todos los días lo hace Roberto Borge y su Vocero.

Lo mucho que aparece el gobernador Roberto Borge en medios estatales, difundiendo sus siempre grandes y exitosas acciones, usted ya lo sabe; no necesito decirle más, pero si no me cree que paga incluso para que su imagen salga en televisoras de alcance nacional, aquí le comparto una muestra, y usted lo puede comprobar viendo algunos de los noticieros de Milenio Televisión y de Efecto TV, donde los conductores, con voz monótona y desinteresada, y sin abundar más, leen cápsulas de unos 30 segundos sobre los grandes “logros” de Borge Angulo.

Desafortunadamente, por donde se le busque, el gobernador Roberto Borge Angulo no está dispuesto a dar cuenta de su dispendio para figurar como un político ejemplar, casi casi paradigmático como se lo han de hacer creer sus serviles funcionarios y asesores; y como él mismo lo siente y lo vive, desde su perspectiva, claro.

En otra solicitud de información, la 0055714, se le requirió a la Unidad de Transparencia del Poder Ejecutivo, “decir con qué medios de comunicación y publicidad tuvo convenio el Gobierno del estado en 2013”. Detallar el monto total que pagó por cada convenio. La respuesta dada por la oficina de Transparencia, que depende directamente, según el organigrama, del Gobernador, fue igualmente de absurda que la de la Unidad del Vocero, pues únicamente halló que algunas universidades, el DIF y la Sedetur tuvieron convenios para difundir su actividad:

(...) “me permito hacer de su conocimiento que de la búsqueda realizada al interior de la Administración Pública Estatal, las Dependencias y Entidades fueron coincidentes en señalar que no tienen convenio referente a medios de comunicación y publicidad en el periodo solicitado, hecha la excepción de la Sedetur, la Fundación de Parques y Museos de Cozumel, el IPAE, el DIF, la UQROO, la Universidad del Caribe, la Universidad Intercultural Maya y la Universidad Politécnica de Quintana Roo. Los montos pagados a los medios de comunicación por estas dependencias, van de los dos mil pesos a los 44 mil; sólo en el caso del DIF hay un pago de 222 mil pesos a Luis Alberto Pavia, por spots del 10 de abril al 7 de mayo, y otro por 59 mil pesos a Grupo Meximedia por anuncios publicitarios en pantalla LED. La Secretaría de Turismo señala que se anexó un documento con la información, pero esto resulto falso, pues no lo entregó.

200 millones de pesos, apenas una leve idea del despilfarro en comunicación social

De los pocos datos que se han obtenido a través de la Unidad de Transparencia, dependencia que se merece una nota aparte por su vergonzoso servilismo, está el de cuánto dinero gasta el Gobierno del Estado en el Sistema Quintanarroense de Comunicación Social (SQCS); que es lo único que reconoce como gasto en comunicación social. El año pasado, el SQCS costó a los quintanarroenses 98 millones 441 mil pesos. (solicitud 00031614)

Otro dato, apenas un asomo, que puede hacer imaginar cuánto nos cuesta la promoción de Roberto Borge, es el gasto en publicidad: en el 2012, fueron 87 millones 060 mil pesos; y el año pasado, aunque el Congreso aprobó sólo 56 millones 311 mil pesos (solicitud 00124613), en realidad se gastaron 94 millones 461 mil pesos, y esta misma cantidad es lo que se presupuestó para el 2014 (solicitud 00004714).

Esto es sólo una pálida imagen del despilfarro, porque bajo mil llaves de opacidad se esconde el verdadero cochinero: el contubernio entre los medios de comunicación y el gobernador Roberto Borge, quien, muy a gusto en su mundo del engaño, publicó el sábado pasado, en periódicos locales, a propósito del Día de la Libertad de Expresión, una carta dirigida “a los medios de comunicación”, en la que se lee:

(…)
“Nada define mejor a un régimen democrático que el hecho de garantizar, por encima de todo, las libertades fundamentales, entre éstas la libertad de expresión y, por ende, la libertad de prensa” (…) “Como gobierno, en Quintana Roo asumimos la función que nos corresponde como garantes de la libertad de expresión”. (…) “Nunca como hoy hubo tantas posibilidades de ejercer el derecho a expresar libremente el pensamiento” (…)

La perorata que pocas personas podrán creerse, es más amplia, pero ni la pena vale dedicarle más espacio a un texto tan absurdo y poco creativo; con el que el gobernador Roberto Borge Angulo felicitó a “sus medios de comunicación”, en el Día de la Libertad de Expresión.

Ya de último, como dato anecdótico que sólo puede entenderse en un lugar como el Caribe mexicano, en Chetumal, la capital del estado, hay un monumento dedicado a la Libertad de Expresión, que permanece, como este derecho, petrificado y sin que nadie se acuerde de él.

En la portada de esta sección se pueden leer las solicitudes de información referidas. (NoticaribeNews)