Los trajes que 75 edecanes lucieron en la toma de protesta del gobernador Roberto Borge Angulo tuvieron un costo unitario de casi 4 mil pesos, (3 mil 987 pesos); la decoración de pasillos del aeropuerto por donde desfilaron cientos de invitados VIP costó casi 80 mil pesos (78 mil 699 pesos); y por los bocadillos para 220 personas que arribaron al hangar del gobierno en el Aeropuerto de Chetumal el gobierno pagó 65 mil 934 pesos.

La lista de artículos y servicios frívolos pagados por el gobierno de Quintana Roo para que el 5 de abril pasado, Roberto Borge Angulo asumiera el cargo de gobernador de Quintana Roo, es larga; y anticipaba lo que se ha confirmado en unos cuantos meses, que Roberto Borge pondría un sello muy especial a su administración: la de los excesos y el despilfarro del dinero del erario público.

De acuerdo a datos obtenidos por NoticaribeNews, a través de la Unidad de Transparencia; a los proveedores que participaron en la entrega de bienes y servicios para la toma de protesta del gobernador Roberto Borge Angulo se les pagó un total de 4 millones 657 mil 476 pesos.
Destaca el dinero erogado para la atención de los personajes foráneos que llegaron al evento; gobernadores de otros estados, lo más granado del priismo, y artistas, quienes fueron recibidos en el área de vuelos privados del Aeropuerto de Chetumal, literalmente, con una alfombra roja.

Para ellos, para los VIP, se contrató un servicio de box lunch, por 5 mil 550 pesos, que se instaló en el hangar; un servicio de coffe break, también colocado en el hangar privado, por 11 mil 100 pesos; además, un servicio de alimento “para invitados especiales” por 20 mil pesos.

Desde su toma de protesta, el gobernador Roberto Borge, sin duda, quiso lucirse frente a los foráneos, demostrar que Quintana Roo es un estado donde sobran los recursos, no importando que éstos provengan de préstamos que han convertido a la entidad en la segunda más endeudada del país.

Y como de lucirse se trataba, en la atención no se escatimó en atención ni para la prensa, la nacional, claro, que era muy bien esperada; ya que para la decoración de la sala de prensa del Centro de Convenciones se tuvieron que erogar 38 mil 295 pesos; y para que los comunicadores que cubrieron el evento no pasaran hambre, se gastaron 74 mil 925 pesos.

Por las 5 mil 500 invitaciones enviadas para el evento se pagó casi medio millón de pesos (445 mil 284 pesos); además en la compra de 225 broches, con el emblema priista se gastaron 107 mil 392 pesos.

Entre los dispendios más inexplicables está la “renta” del Centro de Convenciones de Chetumal, por el que el gobierno del estado, pagó al Instituto de Patrimonio Inmobiliario del Estado (IPAE) 23 mil 310 pesos; es decir, el gobierno se auto arrendó el Centro de Convenciones.

Igualmente, en la lista de proveedores hay apellidos conocidos, como el de Carlos Eduardo Castro Basto, hermano del actual titular de la Secretaría de Infraestructura, Mario Castro Basto, a quien se le pagaron 6 mil 660 pesos, por la renta de un generador eléctrico.
Sin duda la nada austera toma de protesta de Roberto Borge Angulo no fue más que un preludio del sello dispendioso y derrochador que ha marcado el breve pero oneroso gobierno del priista que ganó con menos del 30 por ciento de los votos del padrón electoral. (NoticaribeNews)