La empresa dueña de los parabuses solicitó al ayuntamiento un plazo de 30 días para empezar a colocar los artefactos, a lo cual la comuna accedió, sin embargo, bajo la condición de que durante ese tiempo se verificará la legalidad del contrato firmado en la pasada administración municipal y no precisamente para que se coloquen los aparatos, dice Margarita Vázquez Barrios, titular del departamento jurídico del ayuntamiento.

La funcionaria municipal encargada de los asuntos jurídicos del ayuntamiento, dio conocer que la empresa “Servicios a la Medida S. C.”, propiedad de Víctor Manuel Negrete Villalobos, también dueño de los parquímetros, solicitó al cabildo mediante su director general de nombre Alfredo Garza Rodríguez, una prórroga de 30 días naturales antes de colocar los parabuses.

A lo que el cuerpo colegiado decidió en la décimo Segunda Sesión Ordinaria del 15 de septiembre de este año, que “se fijen los 30 días naturales para analizar la viabilidad y legalidad de la concesión, aclarando que no es una prórroga como la solicitada por el particular y por lo tanto esto no implica el reconocimiento por parte de este cabildo de la validez y legalidad de la concesión de parabuses antes citada”.

De acuerdo a la funcionaria, durante ese tiempo se debía analizar la validez legal del contrato firmado ventajosamente por parte de la pasada administración municipal a favor de la empresa que cobrará totalmente la publicidad que se venda en los mupis publicitarios sin que el ayuntamiento perciba un solo peso, pero en cambio tendrá que indemnizar a la empresa con 10 millones de pesos en caso de cancelarles la concesión o los ayuntamientos venideros durante los próximos 15 años que dura el convenio.

Aunque cabe aclarar que la prórroga ya venció el pasado sábado 15 de octubre y la entrevistada no refirió cual fue el resultado que obtuvieron en la revisión de la concesión.

Por otro lado, confirma que no todos los parabuses estarían colocados en las zonas por donde circulan las rutas de transporte urbano como se manejó para obtener la aprobación del Congreso del Estado, puesto que hay algunos estimados a colocarlos en las zonas hoteleras Norte y Sur.

Además otro de los puntos por tratar es la adecuación de las banquetas donde estarán los parabuses, ya que en alguno de los casos se sitúan en áreas reducidas que impedirían el flujo de los peatones.