Jonathan Adriel Meneses Marín (a) “El Gallito” rindió su declaración preparatoria en el juzgado para adolescentes la mañana de este domingo. En la comparecencia estuvieron presentes familiares del menor, acusado de haber participado en la ejecución de dos mujeres en Isla Mujeres y su abogado defensor, Gaspar Buenfil Caballero, quien fuera director de averiguaciones previas de la Procuraduría de Justicia del Estado en la zona Norte.

Después de haber sido consignado por el Ministerio Público del Fuero Común adscrito a la Fiscalía Especializada en Adolescentes, Jonathan Adriel Meneses Marín (a) “El Gallito”, quedó a disposición de un juez para adolescentes.

El menor fue consignado por el delito de homicidio, aun cuando no fue detenido en flagrancia, ni por elementos de alguna corporación policíaca, pues fueron familiares de las dos mujeres ejecutadas quienes lo aprehendieron.

Después de que Analí Valente Bautista (a) “La Gorda” e Irazema Domínguez Castellanos alias “Erika” fueran ejecutadas en el hotel “San Jorge”, “El Gallito” acompañó a los familiares de éstas a buscarlas y cuando descubrieron los cuerpos, el menor fue retenido por los familiares y después entregado a la policía.

Tras ser detenido, el menor dijo que había ido a buscar a dos sujetos apodados “El Negro” y el “Güero” al muelle de “Ultramar” y después él se encargó de alquilar la habitación en el hotel.
Incluso, dijo que él mismo fue a comprar las vendas que utilizaron los sicarios para amarrar y amordazar a las mujeres, pues según él, le dijeron que uno de los dos sujetos se había lastimado.

Como si fuera un orgullo, “El Gallito” declaró ser adicto a la marihuana, a la cocaína y al crack, sin embargo, cuando le realizaron los exámenes toxicológicos, apenas y dio positivo al consumo de marihuana.

Cuando leyeron la declaración ministerial del menor en el juzgado, su madre ahí presente le preguntó por qué había declarado eso y éste le respondió que lo había hecho para impresionar a su novia.

Por la misma razón, declaró que era líder en Isla Mujeres en la distribución de drogas, lo que al parecer, también fue un invento del menor para impresionar a su novia, pues en realidad se dedicaba a hacer “mandados” a integrantes del grupo delictivo de “Los Pelones”.

Sin embargo, “El Gallito” sabía que las dos mujeres que fueron ejecutadas, fueron llevadas con engaños al hotel “San Jorge”, en donde sabía que algo les harían, aunque en sus propias palabras, “Yo creí que sólo las iban a tablear, no pensé que las fueran a matar”.

En el juzgado también se encontraba el abogado defensor de “El Gallito”, quien resultó ser el ex director de averiguaciones previas de la Procuraduría de Justicia en la zona Norte, Gaspar Buenfil Caballero.

El juez para adolescentes en turno, será quien determine enviar al menos al Centro de Internamiento para Adolescentes, o dejarlo en libertad por falta de elementos.