En sus investigaciones sobre el asesinato del empresario Raúl Enrique de Jesús Encalada Burgos, la Subprocuraduría de Justicia estableció el robo como posible móvil, luego de que se conociera que éste se encontraba en proceso de venta de su empresa de cortinas anticiclónicas y había recibido un anticipo de 60 mil pesos, los cuales fueron sustraídos de su vivienda.

Los agentes investigadores también determinaron que los responsables del crimen, al dejar un mensaje, trataron de aparentar una ejecución atribuible a la delincuencia organizada para tratar de desviar el curso de las investigaciones.

Igualmente se infiere que el asesino fue un conocido de Raúl Encalada, ya que, al parecer entró a su casa con su consentimiento, pues las cerraduras no fueron forzadas.

El cuerpo del empresario fue entregado a su hijo, Juan Carlos Encalada Hernández, quien llegó procedente de Veracruz, para realizar los trámites funerarios.

De acuerdo a la necropsia, el crimen fue cometido la noche del sábado, aunque el cuerpo fue localizado hasta la mañana del lunes, cuando llegó la empleada doméstica.

Como se recordará el occiso fue localizado ayer por la mañana en el interior de su vivienda ubicada en la Supermanzana 50; tenía la cabeza cubierta con cinta canela, y estaba amarrado de pies y de manos. Se determinó que la causa de la muerte del empresario fue la asfixia. (NoticaribeNews)