Confiesa concubina de Agente del Ministerio Público de Cancún que lo asesinó porque "ya estaba cansada"

Un asesinato a sangre fría fue lo que cometió Lucía López Morfín, quien privó de la vida a su esposo, el agente del Ministerio Público, Jaime de la Cruz Radilla, en un domicilio de la Región 216, en Cancún; según las investigaciones de la Policía Judicial del Estado (PJE).

El hallazgo del cuerpo fue reportado a las 2:30 de la madrugada de hoy en la Región 216, Manzana 6, lote 1, hasta donde se trasladaron elementos de las distintas corporaciones, y encontraron sin vida al agente del Ministerio Público sobre la cama de su habitación, en donde también había un cuchillo cebollero. El occiso tenía las manos encintadas y el rostro cubierto con una playera.

La esposa del Policía Judicial confesó el asesinato del agente, luego de que en el interrogatorio cayera en contradicciones. Lucía López narró que utilizó cloroformo para dormir a su esposo, Jaime de la Cruz Radilla, a quien después apuñaló en 48 ocasiones; posteriormente, le encintó las manos, para tratar de aparentar un asalto.

La presunta responsable, Lucía López Morfín confesó que mato a su pareja porque "ya estaba cansada de que no la apoyara económicamente" y que "solo tenía ojos para su otra familia"

Al rendir su declaración ministerial, dentro de la averiguación previa número 998/2013, por el delito de homicidio calificado, la indiciada, concubina del hoy occiso, relató cómo se dieron los hechos y aceptó su autoría en el crimen perpetrado la madrugada de este viernes, en la supermanzana 216, manzana 6, lote 1, casa 5.

Lucia López Morfín, de 34 años de edad, originaria del Estado de Tabasco, concubina del occiso desde hacía seis años, procreó un hijo con él, declaró que tenían muchos pleitos por asunto de dinero, y la noche del crimen sentía mucho coraje porque le pidió dinero a su pareja para atender un choque que tuvo y éste le contestó que le había dado todo el dinero a su familia y eso la enfureció; además que la dejó hablando sola mientras él se dormía.

López Morfín inicialmente declaró que tres sujetos habían entrado a su vivienda a robar y habían apuñalado a su esposo. Hasta ahora se desconoce el móvil del crimen.

Sin embargo, luego de ser detenida por la Policía Judicial del Estado (PJE), por el homicidio de quien fuera agente del Ministerio Público, Jaime de la Cruz Radilla, la presunta responsable, Lucía López Morfín confesó que mató a su pareja porque "ya estaba cansada de que no la apoyara económicamente" y que "solo tenía ojos para su otra familia", informó el encargado en turno de la Representación Social.

Al rendir su declaración ministerial, dentro de la averiguación previa número 998/2013, por el delito de homicidio calificado, la indiciada, concubina del hoy occiso, relató cómo se dieron los hechos y aceptó su autoría en el crimen perpetrado la madrugada de este viernes, en la supermanzana 216, manzana 6, lote 1, casa 5.

Lucia López Morfín, de 34 años de edad, originaria del Estado de Tabasco, concubina de 6 años, procreo un hijo con Jaime de la Cruz, y declaró que tenían muchos pleitos por asunto de dinero, y la noche del crimen sentía mucho coraje porque le pidió dinero a su pareja para atender un choque que tuvo y éste le contestó que le había dado todo el dinero a su familia y eso la enfureció; además que la dejó hablando sola mientras él se dormía.

El cuerpo del hoy occiso recibió 48 lesiones de arma punzocortante y punzopenetrante que le causaron la muerte al agente ministerial; la homicida le aplicó cloroformo para someterlo y evitar que se defendiera, al ver que ya estaba inconsciente le clavó el cuchillo en el pecho.

El reporte del homicidio llegó a la guardia de la policía Judicial a las 02:30 horas por lo que el personal de guardia, peritos, agentes investigadores y agente del Ministerio público se trasladaron al lugar de los hechos para iniciar las diligencias y dar fe del cadáver y levantamiento del cuerpo.

En la escena del crimen los peritos de los Servicios Periciales observaron en una habitación de la planta baja de la vivienda, el cuerpo del hoy occiso en posición de decúbito dorsal, sobre la cama, desnudo, con las manos hacia el frente, atadas con cinta canela y con lesiones de arma blanca.

En el lugar se encontraron un cuchillo cebollero de 40 centímetros sobre la cama, un pica hielo sobre el tocador envuelto con papel de baño, manchado de sangre y un rollo de papel de baño en el tocador con manchas de sangre, sobre el mismo tocador se encuentra una botella de alcohol de curación, y una botella de alcohol en una repisa, a la mitad de su contenido.

Se observó goteo dinámico en el cuarto, pasillo, escaleras y sala, y se observaron huellas de pisadas descalzas, de 24 centímetros, en la sala y comedor, y en la recamara las pisadas se observan barridas.

Se encontró un trapeador con manchas de sangre con el que al parecer limpiaron las gotas de sangre en la sala, en la planta alta se observan pisadas descalzas con sangre en una recámara y el baño; en el baño se encontró un trapeador, una bata de mujer manchada de al parecer sangre y una toalla húmeda colgada.

La zona de la regadera se observó húmeda, al parecer por uso reciente, se aplicó luminol para rastrear sangre en el baño, fuera de la regadera y salió positivo a luminiscencia, también se aplicó rastreo hemático en todo el lugar y dio positivo.

Una vecina de la presunta homicida refiere que ésta llegó a su domicilio, supuestamente a pedir ayuda, que traía con calcetas puestas, una toalla amarrada que le cubría la nariz y la boca, con un nudo sencillo y con olor a alcohol; y según refirió Lucía López era cloro formo; también tenía encintadas las manos hacia atrás pero la vecina con un ligero tirón le quitó el amarre.

En el lugar no se observaron cerraduras forzadas ni que faltasen objetos de valor.

El cuerpo de Jaime de la Cruz Radilla reportó seis heridas en el cuello,13 heridas en el tórax, 15 heridas en el abdomen, nueve heridas en extremidad torácica y cuatro heridas en extremidades pélvicas.

Se concluye que se encontraron en el cuerpo un total de 48 heridas por arma blanca distribuidas al exterior del cuerpo; 4 de estas fueron penetrantes en cavidad de tórax y 9 en cavidad abdominal y son dichas heridas las que se clasificaron como mortales. (NoticaribeNews)