Familiares de Manuel Tox Sosa, el anciano de 70 años que recibió un balazo por parte de elementos del Grupo Zorros, en un ilegal cateo a su vivienda en Bacalar, acudieron esta mañana a las oficinas de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) para solicitar la intervención del ombudsman ante la violación a sus garantías individuales, dijo Juliana Elizabeth Tox.

Juliana Elizabeth Tox María y Antonia Euan Tox, acudieron ante la CEDH acompañadas de dos menores, quienes, por cierto, también se encontraban presentes el día de la agresión policíaca, el viernes 9 de diciembre pasado.

Las mujeres fueron atendidos por el primer visitador José Carlos Cortés Mogartegui, quien las canalizó al área correspondiente para recibir su queja, y en la que las mujeres dejaron asentados los hechos, ocurridos en su casa, ubicada en la calle 34, número 86 entre 19 y 21 de la colonia Benito Juárez , de Bacalar.

Las afectadas narraron que policías estatales, adscritos al grupo Zorros, irrumpieron violentamente en su hogar, con el supuesto objetivo de localizar drogas; sin embargo, los uniformados no exhibieron orden de cateo alguna, además de que golpearon a los que se encontraban en la vivienda, y despojaron de siete mil pesos a Antonia Euán Tox. Agregaron que los policías estatales sólo se retiraron cuando se dieron cuenta que habían lesionado con un proyectil de arma de fuego a su padre Manuel Tox Sosa, quien se recupera en el Hospital General.

El Primer Visitador comentó que el sábado 10 de diciembre recibieron a las agraviadas, y les recomendaron realizar primero su denuncia ante el Ministerio Público, y posteriormente regresar a la Comisión de Derechos Humanos.

El funcionario añadió que una vez integrada la queja, y realizada la investigación, el órgano vigilante de las garantías individuales, emitirá una recomendación, en caso que las acusaciones de abuso policíaco, resulten ciertas.

El abuso y la intimidación por parte de la Secretaría de Seguridad Pública, dirigida por el General Carlos Bibiano Villa Castillo, continúa, pues agentes de esa corporación custodian a Manuel Tox Sosa, como si estuviera en calidad de detenido, y no de agraviado, por lo que una de las hijas del lesionado acudió al departamento jurídico de la Policía Estatal Preventiva, para preguntar el por qué de la presencia policiaca.

A pesar de que se trata de un evidente acto de abuso policial, Manuel Tox Sosa, comentó que lo único que pide es que los responsables de su lesión, paguen los gastos médicos, pues ahora su familia apenas está reuniendo dinero para comprar los clavos que necesita para que el septuagenario pueda ser operado del brazo lesionado, antes que el daño óseo sea irreversible.

Seguridad Pública está a la espera de lo que determine el Ministerio Público

Por su parte, de acuerdo a fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública, se está a la espera de lo que determine el Ministerio Público en el caso de Manuel Tox Sosa, y en caso de que algún elemento resulte responsable de haber disparado contra el anciano, se le aplicará la pena correspondiente.

Como parte del procedimiento interno, la Dirección de Asuntos Internos de la dependencia realiza su propia indagatoria.

Como se recordará, de acuerdo a la versión del General Carlos Bibiano Villa, titular de la Secretaría de Seguridad de Quintana Roo, los agraviados fueron los policías del Grupo Zorros, ya que éstos lanzaron “balas de goma” al ser agredidos con piedras y cocos por los pobladores de Bacalar cuando liberaron a Manuel Tox Sosa, de 70 años, quien, según los uniformados, se dedica al narcomenudeo.

Además, la Dirección Jurídica de la Secretaría de Seguridad interpuso una denuncia por lesiones, ultrajes a la autoridad; el robo de una pistola de un agente y el extravío del enervante incautado al presunto narco distribuidor. (NoticaribeNews)