De ahí que, si se incluyen proyectos como Península Cancún, Bay View Grand, las ex Villas Juveniles, Condominios Kukulcán 42 o el hotel Cancún Marina Club, probablemente se rebasen con creces los 30 mil 990 cuartos que según el Plan de Desarrollo Urbano (PDU) y el Programa de Ordenamiento Ecológico Territorial Local (POEL) puede soportar la zona.
Entre los grandes proyectos que quedaron frenados y a medio construir destaca Península Cancún, propiedad de los hermanos Bribiesca y su segunda etapa, ubicada en el kilómetro 23.5 de la zona hotelera, permanece paralizada desde el año 2007 tras negar la Semarnat la autorización de la Manifestación de Impacto Ambiental y permisos de desmonte en la zona de Punta Nizuc a los promoventes del desarrollo turístico.
La Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental constató que Península Cancún atenta contra el entorno natural y viola la Ley General de Vida Silvestre al poner en riesgo el ecosistema de manglar en su intento de construir una torre de alta densidad urbana en un espacio donde se tiene una unidad de gestión ambiental 09, la cual no tolera cargas de edificación.
La primera etapa de Península Cancún, que cuenta con una torre y áreas recreativas, sí terminó de construirse gracias al contubernio existente entre los hermanos Bribiesca y el entonces titular de la Profepa, Patricio Patrón Laviada, quien protegió el proyecto a pesar de la considerable devastación de mangle efectuada para llevar a cabo esta edificación.
La empresa Península de Cancún SA de CV inició trámites con el nombre de Residencial Punta Nizuc ante la Semarnat para avalar la construcción de un edificio de condominios
La Manifestación de Impacto Ambiental de este proyecto fue presentada el 18 de febrero del 2009 con la clave 23QR2009T0007 y en la misma se especifica que consiste en la construcción de un desarrollo vertical de departamentos en un predio de 13 mil 196.77 metros cuadrados, compuesto por un edificio de 13 niveles con 46 departamentos, 4 penthouses y un mezannine, estacionamiento, una alberca y pérgolas".
Villas Juveniles
Aunque las que fueran Villas Juveniles, propiedad del desaparecido CREA, pretendían convertirse en un hotel escuela, finalmente el ex gobernador Félix González Canto se desistió de los planes y vendió el terreno a particulares, que intentaron levantar el proyecto condominal Caveri, consistente en una torre de 20 pisos.
Este fue uno de los ocho proyectos que el anterior alcalde Jaime Hernández Zaragoza presentó al Cabildo con la intención de que el Cuerpo Colegiado aprobase modificaciones de uso de suelo que permitieran la construcción de edificios de mayor densidad; por el momento esto no ha sucedido y el proyecto Caveri permanece sumido en el olvido.
Durante los primeros meses de gobierno de González Canto se invirtieron 53 millones 900 mil pesos en el proyecto del hotel escuela, pero tras el impacto del huracán "Wilma" el inmueble quedó en el abandono, a pesar de la inversión realizada y la promesa de construir dicho el hotel escuela, para lo cual se había realizado un convenio.
El mismo ex gobernador reconoció que uno de ocho proyectos que se presentaron el pasado cuatro de marzo ante el Comité Técnico de Desarrollo Urbano y Vivienda (CTDUV) del Ayuntamiento de Benito Juárez fue Caveri, mismo que al igual que los siete restantes no fue aprobado por el Cabildo.
Los terrenos que ocupan las ex Villas Juveniles se encuentran divididos en dos lotes; uno de ellos, cercado con malla ciclónica y en el que se puede leer “propiedad privada, no pasar, título de propiedad expedido por el IPAE” fue adquirido por un particular, presumiblemente Carlos Constandse Madrazo, socio del grupo Xcaret, en tanto que el otro espacio, donde se levantan los edificios de las Villas Juveniles del desaparecido CREA, es en el que se pretendía construir el proyecto Caveri.
Cancún Marina Club
Otro “elefante blanco” que quedó a medio construir es el antiguo hotel Cancún Marina Club, ubicado en la supermanzana 2, manzana 36, lote 3-A sección C de la zona hotelera.
El propietario del inmueble, un pequeño centro de hospedaje, tenía intenciones de ampliarlo con más niveles y por ende, un mayor número de cuartos.
En su parte inferior se encontraba un negocio de cierta cadena abierta las 24 horas que hace aproximadamente tres años fue embargado y aunque se ignora si el hotel también fue parte de dicho embargo, la realidad es que desde ese momento las obras de ampliación quedaron paralizadas e incluso se puso a la venta desde hace más de un año.
Las obras, con uso de suelo TH1, se encontraban a cargo del ingeniero Mario Antonio Camacho Aguayo, y la Dirección de Desarrollo Urbano otorgó la licencia de construcción 5185 con vigencia del 14 de octubre del 2009 al 14 de octubre del 2011, misma que ya expiró.
Condominios Kukulcán 42
Para finalizar la lista de proyectos frenados o inconclusos, encontramos los Condominios Kukulcán 42, en el kilómetro 2.5 de la zona hotelera, junto a Playa Las Perlas, el cual fue clausurado por la Profepa, Desarrollo Urbano y Ecología Municipal, al carecer de los permisos correspondientes así como de la Manifestación de Impacto Ambiental.
Aquí se pretende edificar un condominio de siete edificios con cinco niveles cada uno, lo que suman un total de 42 departamentos, distribuidos en una superficie total de mil 556.20 metros cuadrados, para los cuales el propietario, Proyectos Inmobiliarios de Culiacán, SA de CV, corporativo Homex, tiene contemplado aplicar una inversión de 166 millones 779 mil 809 pesos.
Y aunque fuentes del corporativo intentaron minimizar los hechos al asegurar que las clausuras ya estaban levantadas y si no se retomaba la obra era por la sencilla razón de que estamos a fines de año y no son momentos propicios al encontrarse tan cerca el periodo navideño, la realidad es que dichas clausuras no se han resuelto aún, presuntamente porque la Semarnat aún no aprobó la Manifestación de Impacto Ambiental presentado por Homex.