A siete años de su detención “El Caníbal” sigue esperando sentencia

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  • Chetumal
  • Diciembre 2011, 12 21:27:39
Hoy se cumplen siete años del arresto de Gumaro de Dios Arias, mejor conocido como “El Caníbal de Playa del Carmen”, quien preso en el Centro de Readaptación Social de Chetumal, aún no recibe sentencia, pues en su momento, el Juzgado Mixto lo declaró inimputable.

Como se recordará, Gumaro de Dios fue detenido el 13 de diciembre de 2004, luego del asesinato de su compañero de parranda Raúl González, a quien después cortó en pedazos y empezó a comerse.

A pesar de que El Caníbal, padece de un cuadro agudo de esquizofrenia, recibe el mismo trato que los más de mil reos con los que convive en el Cereso de Chetumal; aunque se le brinda atención especial con la intención de reintegrarlo, algún día, a la sociedad, según información proporcionada por autoridades del centro penitenciario.

Las fuentes consultadas comentaron, que los tratamientos psiquiátricos a los que ha sido sometido durante estos siete años, Gumaro de Dios, han logrado mejor su conducta, aunque aún se le considera de alta peligrosidad, por lo que, la mayor parte del tiempo, se le aísla de los demás internos.

Por la declaratoria de inimputable de El Caníbal, éste permanecerá internado el penal de Chetumal, hasta que el Magistrado determine si es transferido a un centro psiquiátrico.

Hace siete años

De acuerdo a los hechos, fue el 13 de diciembre de 2004, cuando al norte de Playa del Carmen, cerca del hotel Mayakoba, policías municipales y judiciales acudieron a una palapa, situada en las cercanías de ese lugar donde hallaron a Gumaro de Dios Arias, originario del estado de Tabasco, junto a los restos de un cadáver cercenado y ya en estado de putrefacción, al que había mutilado algunos órganos, mismos que ya había cocinado, y consumido; por lo que el hombre, que a partir de entonces recibió el sobrenombre de “El Caníbal”, fue detenido y puesto a disposición del Ministerio Público.

En su declaración ministerial, El Caníbal, reconoció haber asesinado a su compañero de juerga, Raúl González, tras haber discutido por 500 pesos, que presuntamente utilizarían para comprar más drogas y bebidas alcohólicas.

Aunque se le detectó un agudo cuadro de esquizofrenia, El Caníbal reconoció que asesinó a su compañero, bajo el efecto de las drogas.

Como si se tratara de una res, Gumaro de Dios, después de asesinar a su compañero, colgó el cadáver boca abajo para desangrarlo, y posteriormente extraerle los órganos, y cocinarlos; los cuales se comió, acompañados con una salsa que preparó.

El festín de El Caníbal se prolongó por un par de días, hasta que fue denunciado por gente que pasó por el lugar, y dio parte a las autoridades.

Pero, Gumaro de Dios no parece estar del todo arrepentido, pues mientras permaneció en la cárcel municipal de Playa del Carmen, a mediados de 2006, se cortó parte de la oreja izquierda con la intención de comérsela.

En diciembre de ese mismo año, prendió los focos del penal municipal, ya que amenazó con comerse al cocinero, porque no le agradaba su sazón, pues los alimentos le parecían insípidos. A partir de entonces, Gumaro de Dios permaneció recluido en completo aislamiento, y bajo estrictas medidas de vigilancia.

Fue el juez penal Abraham Loeza Ortiz, a cargo del expediente 362/4, quien consideró que El Caníbal no podía ser juzgado como un delincuente, pues era un enfermó que padecía “esquizofrenia paranoide y trastorno mental”, por lo que debía ser trasladado a un centro especializado antes de someterlo a juicio.

Por esta determinación, se decidió trasladarlo al Centro Federal de Rehabilitación Psicosocial (Ceferepsi), en Cuatla, Morelos, donde recibió terapias; sin embargo, las autoridades judiciales aún no deciden qué hacer con Gumaro de Dios. (NoticaribeNews)