El 13 de octubre pasado, unas quince personas entre hombres y mujeres, varios de ellos armados, irrumpieron en el inmueble que albergó el hotel Club Las Velas, ubicado a la altura del kilómetro 3.5 de la zona hotelera de Cancún, donde aseguraron un área de más de 6 mil metros cuadrados de supuesta zona federal marítimo terrestre.
La superficie asegurada es parte de un inmueble que el arquitecto Tomás Auñón Alonso adquirió de Fonatur en 1984, y en donde construyó uno de los primeros hoteles bajo el concepto todo incluido.
De acuerdo a Auñón Alonso, fue alrededor de las 14:30 horas cuando las personas que irrumpieron cortaron parte de una malla que protegía la propiedad e ingresaron al Club Las Velas, y sin mediar palabra empezaron a colocar cinta amarilla para delimitar la zona asegurada, que abarca parte del patio de la propiedad, un área verde, y una zona donde se ubican las oficinas del arquitecto Tomás Auñón, quien en ese momento se encontraba en el lugar.
El afectado señaló que además de que los agentes ministeriales entraron ilícitamente a la propiedad, la cual actualmente se encuentra en un fideicomiso, éstos se negaron a mostrarle cualquier orden de aseguramiento o a informarle la razón del mismo.
“Uno de los agentes me dijo que al frente del operativo venía el Maestro Pauli, por lo que pedí hablar con él, y me dijeron que lo esperara por la parte de afuera del hotel. Entonces salí, y esperé en la calle, sin que jamás apareciera el tal Pauli”, comentó Tomás Auñón, uno de los empresarios pioneros de la hotelería en Cancún. “Adentro, civiles, un supuesto topógrafo y ministeriales, quienes en su mayoría no portaban uniforme que los identificara, continuaron el aseguramiento de lo que ellos consideraban era una zona federal. Lo que más me llama la atención de esto es que la Fiscalía General del Estado no tiene competencia sobre zonas federales; desde allí, la irregularidad, enfatizó Auñón Alonso.
Cabe destacar que el “maestro Pauli” es Alfonso Díaz Pauli, uno de los hombres más cercanos al fiscal general Óscar Montes de Oca Rosales, y quien también formó parte de la entonces Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México.
Este nuevo despojo, disfrazado de aseguramiento, ha beneficiado a la empresa Chi Chi Bichi SA de CV, misma a la que, al parecer, le fue entregado en “depósito” la superficie asegurada donde unos días después del aseguramiento inició obras de construcción en el área.
Simultáneamente a la ejecución del aseguramiento del Club Las Velas, se llevó a cabo otro operativo en la propiedad de la Marina Dulché, colindante, y a la que igualmente le aseguraron la zona federal.
Tomás Auñón destacó que Chi Chi Bichi SA de CV pretende construir en las zonas aseguradas un hotel de 7 pisos con 136 habitaciones y un sótano para estacionamiento, con 4 restaurantes y locales comerciales, además el proyecto incluye espacio para 40 embarcaciones.
Al día de hoy, los abogados de Auñón Alonso no han podido tener acceso a la carpeta de investigación. (DRON: ÓSCAR CAMACHO)
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